Carlos López vestida con un traje de colores y corona dorada llegó al proscenio del Capitol. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
Ayer, 15 de febrero del 2020, como parte de la programación de la segunda edición del encuentro escénico La Plaza de la Danza se presentó, en el Teatro Capitol, la obra ‘Nuestra Señora de las Maricas’, una pieza creada por el Proyecto Lilith y el Colectivo Zeta.
La obra interpretada por Luis Cifuentes, Edison Galván y Carlos López explora, desde la estética barroca y la cultura popular, las sensibilidades y los deseos, así como la discriminación que han vivido históricamente los miembros de la comunidad Lgbti, que se autodefinen como maricas.
Las reflexiones que propone esta obra parten de la palabra. Su nombre hace una clara distinción entre lo gay y lo marica. La primera, como sostiene el catedrático Diego Falconí, está muy vinculada a las connotaciones de clase y de colonialidad, mientras que la segunda a la de la exclusión.
Luis Cifuentes, Edison Galván y Carlos López interpretaron la obra ‘Nuestra Señora de las Maricas’. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
“Pareciese que el gay tiene buen gusto, que es más elegante y que el maricón es cualquier cosa”, afirma.
La obra inició con un guiño al barroco ecuatoriano. López, vestida con un traje de colores y corona dorada, llegó al proscenio del Capitol cargada en hombros por Cifuentes y Galván, al compás de los sonidos propios de las procesiones religiosas católicas.
Durante su estancia en el escenario los cuerpos de estos tres artistas se movieron al ritmo quebradizo de No me arrepiento de este amor, el éxito que Gilda, cantante argentina, lanzó en 1994; la nostalgia del Ave María de Schubert, y el compás romántico de Cómo te voy a olvidar de los mexicanos Los Ángeles Azules.
En la Plaza de la Danza se presentó, en el Teatro Capitol, la obra ‘Nuestra Señora de las Maricas’, una pieza creada por el Proyecto Lilith y el Colectivo Zeta. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
El trabajo performático de López, una drag queen que es parte del Proyecto Lilith y Galván y Cifuentes, bailarines de la Compañía Nacional de Danza, cobró fuerza con la proyección de imágenes de archivo del programa la TV grabadas en 1991, en la cual aparecen hombres y mujeres dando a conocer su punto de vista, la mayoría discriminatorios, sobre los miembros de la comunidad Lgbti.
La obra dirigida por Xavier Delgado, del Colectivo Zeta, está inspirada en un poema de Olmedo Guerra, un texto que hace referencia a los maricas asesinados en el país, a nombre de la familia, la religión y el machismo.
La programación de la Plaza de la Danza continuará con la presentación de la ‘Batalla’, el miércoles, a las 19:30, en la Compañía Nacional de Danza. La obra es una confrontación entre dos actores: por una parte Hassan Razak, especialista en percusión corporal y por otra, Pierre Cartonnet, especialista en acrobacias.
La obra dirigida por Xavier Delgado, del Colectivo Zeta, está inspirada en un poema de Olmedo Guerra. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
El jueves, en este mismo espacio se presentará ‘Crash Studies’, interpretada por el ecuatoriano Christian Masabanda y el francés Gauthier Autant. La pieza es el resultado de la residencia artística que Masabanda hizo en Francia.
El encuentro terminará con la presentación de Hope Hunt & The Ascencion Into Lazarus de la coreógrafa De Oona Doherty, de Irlanda de Norte. Las funciones son gratuitas.