Imagen referencial. Aunque los médicos lograron detener la acumulación de sangre en la zona genital, los pulmones del adulto mayor continuaron deteriorándose, por lo que falleció poco después. Foto: EFE
No es un síntoma directo del covid-19, pero sí es algo que podría llegar a ocurrir en ciertos pacientes infectados con el virus. Un reporte publicado en The American Journal of Emergency Medicine describe el caso de un paciente que -a raíz de una complicación tromboembólica– tuvo una erección que duró tres horas.
El caso fue tan grave que el paciente terminó falleciendo. El hombre de 69 años, con obesidad, ingresó a Emergencias en el Miami Valley Hospital, en Florida (Estados Unidos). Esto ocurrió después del diagnóstico de un médico particular, que le recomendó seguir tratamiento en casa.
Sin embargo, después de presentar problemas para respirar, decidió internarse. Tras 10 días en el hospital, su salud comenzó a deteriorarse y desarrolló altas temperaturas corporales, además de una tos incesante.
El paciente necesitó esteroides y un ventilador. Fue colocado boca abajo sobre la camilla para ayudar al flujo de oxígeno en su cuerpo.
Lo que ocurrió tiene el nombre científico de priapismo, una erección prolongada, pero sin estimulación sexual. Por lo general, este fenómeno genera un intenso dolor en la zona genital.
Es una condición rara y suele presentarse en personas con desórdenes sanguíneos como la anemia falciforme, que afecta a las glóbulos rojos, leucemia o mieloma múltiple, un cáncer de células plasmáticas. A raíz de una infección de covid-19, este tipo de reacción corporal ha sido reportada en una sola ocasión adicional, en 2019.
Los doctores intentaron usar hielo en el paciente para bajar la inflamación. Al ver que esto no funcionaba, hicieron un ultrasonido en la zona genital. Observaron que sus vasos sanguíneos estaban funcionando correctamente, por lo que diagnosticaron priapismo isquémico, que tiene que ver con problemas de drenaje sanguíneo.
El procedimiento estándar para solucionar esta complicación es insertar dos agujas en el pene para drenar la sangre en exceso. Media hora después del procedimiento, la erección del paciente se había ido. Sin embargo, los pulmones del adulto mayor continuaron deteriorándose, por lo que falleció poco después.