Joey Montana: ‘Las metáforas murieron con la música urbana’

El cantante panameño Joey Montana participó en una gira de conciertos por el país. Foto: cortesía.

El cantante panameño Joey Montana participó en una gira de conciertos por el país. Foto: cortesía.

El cantante panameño Joey Montana participó en una gira de conciertos por el país. Foto: cortesía.

Joey Montana se mueve entre el género urbano, el ‘swing más calle’ del reguetón y lo que él llama el reggae en español panameño. Este último es un ‘sitio’ que refresca los sonidos jamaiquinos de los años 80 y 90, y al que los músicos panameños y el idioma español le imprimieron su propio ‘flow’ o sabor.

Un ‘loop’ rítmico del tema Dem Bow, del cantante jamaiquino de reggae Shabba Ranks, originó al ‘dembow’, “la clave de percusión del reguetón que se ha globalizado en las fusiones de la música urbana latina y que llegó para quedarse”, explica el artista. “Es híbrido; si no quieres hacer reguetón, te permite hacer lo tuyo, mezcladito”, dijo. “Ya no solo hay puertorriqueños y colombianos, hay venezolanos, españoles y gente como Paulo Londra, de Argentina. El género se volvió rico y suena a muchas cosas, difícilmente se va acabar”.

El cantante panameño realizó una gira por cuatro ciudades del Ecuador en el marco del festival carnavalero La Fiesta de Todos, promovida por la empresa privada y las Cámaras Provinciales de Turismo del Ecuador.

En una entrevista con EL COMERCIO, el intérprete de Picky, Suena el dembow y La melodía habló sobre la globalización del género, además de sus retos y posibilidades.

“Estoy escribiendo también temas para otros artistas, como La minifalda (2019), para Greeicy y Juanes. Y vengo de un campamento de composición con suecos y estadounidenses, 10 días en Dominicana, en la casa de Pitbull, componiendo canciones en inglés y en spanglish, con esta cosa muy comercial y radial latina”, contó Montana.

En República Dominicana compartió con productores como Marty James, que coescribió la mezcla en inglés del Despacito, para la versión que popularizó Luis Fonsi con Justin Bieber. “El español está tan pegado después de Despacito, que (el grupo estadounidense de electropop) Black Eyed Peas graba con (el colombiano) J Balvin, se meten frases en español en las canciones y se buscan esas fusiones con artistas latinos”, agregó Joey.

Ahora lo han invitado a otros dos campamentos de composición en Grecia y Dubái, lo que para el panameño no es más que otro síntoma de la penetración mundial del género.

En los campamentos se impone ley del: “no nos aburra, vete pa’l coro”. “No sé adónde irán las canciones que salen de ahí, pero el español les suena sexy para la disco. Y si le gusta la melodía, siempre las pueden cambiar por completo a inglés”.

Edgardo Miranda
, el nombre con el que nació hace 37 años antes de convertirse en Joey Montana, reconoce que mucha de esta música “también dice estupideces o no dice nada”, se vuelve una sucesión repetitiva de sonidos guturales y de frases como “la agarré, la pegué a la pared, la perrié en la disco”. Ello representó un peligro para el género antes de la irrupción de los cantantes colombianos, a su criterio.

Es consciente de que las letras del urbano se adaptan a una noción moderna de las relaciones de pareja, la de “los chamaquitos”. “En el ‘romantiqueo’ juvenil todo es más directo, es la única manera de poder mantenerte actual”, apuntó. Añadió que “lo poético no entra tanto porque los jóvenes ya no hablan en esos términos. Y las metáforas murieron con la música urbana, a no ser que tiendan más a lo sexual. Igual se distingue quien te dice cosas inteligentes”.

Montana pretende lanzar hasta 14 temas este año, al menos uno por mes, “al ritmo que impone la industria”. Su próximo sencillo se titulará Por ti, de sonido urbano. Luego vendrá Swith, un tema más bailable. Este año prevé colaboraciones con Sebastián Yatra y con los también colombianos Cali y El Dandee.

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