Incertidumbre sobre muerte de hipopótamo indigna a El Salvador

El hipopótamo fue encontrado muerto el domingo 26 de febrero y, un día después, las autoridades atribuyeron su muerte a un ataque con palos y armas punzocortantes.

El hipopótamo fue encontrado muerto el domingo 26 de febrero y, un día después, las autoridades atribuyeron su muerte a un ataque con palos y armas punzocortantes.

El hipopótamo fue encontrado muerto el domingo 26 de febrero y, un día después, las autoridades atribuyeron su muerte a un ataque con palos y armas punzocortantes. Foto: Twitter / @AnimalSonoro

El anuncio de que Gustavito, el emblemático hipopótamo del zoológico de El Salvador, había sido hallado muerto el pasado domingo 26 de febrero de 2017 tras ser atacado por personas causó conmoción en El Salvador, uno de los países con mayor índice de homicidios en el mundo.

Pero casi una semana más tarde, la confusión reina. Ante la versión de la muerte violenta, la Fiscalía General de la República (FGR) ordenó una evaluación con forenses independientes que apuntó, preliminarmente, a una hemorragia pulmonar como causa de la muerte.

Pero la polémica no se detiene. El hipopótamo fue encontrado muerto el domingo 26 de febrero y, un día después, las autoridades atribuyeron su muerte a un ataque con palos y armas punzocortantes.

“La necropsia dice que no se observa penetración en la piel por objeto cortopunzante. La piel de este animal es de 2,5 centímetros de grosor, es muy difícil que puedan penetrar con un picahielo como se dijo en un primer momento”, explico el jueves 2 de marzo el fiscal Mario Salazar.

La primera versión sobre la muerte del hipopótamo fue divulgada por la Secretaría de Cultura, encargada de administrar el zoológico. La entidad sostuvo que se sumaba “al dolor y la indignación por la muerte del hipopótamo Gustavito, luego de que personas sin escrúpulos y sin respeto por la vida animal le propinaron una brutal golpiza y heridas”.

Al día siguiente, la ministra de Medio Ambiente, Lina Pohl, en declaraciones reproducidas por El Diario de Hoy, confirmó que había habido un ataque pero sostuvo que la muerte se debió al estrés.

“Ha sido un ataque fuerte y está mal”, manifestó Pohl, y agregó que la agresión al hipopótamo “es el reflejo de un país donde no estamos preocupados por la vida silvestre, no estamos preocupados por la vida”.

Pero ese mismo día, el Sindicato de Trabajadores de la Secretaría de Cultura sostuvo que en el momento de la muerte Gustavito tenía 17 días enfermo y que las autoridades no le dieron seguimiento.

La noticia del asesinato del animal tuvo amplia divulgación en la prensa salvadoreña e internacional y reforzó la imagen de El Salvador como un país violento. Tras conocer la versión de la fiscalía, la secretaria de Cultura, Silvia Elena Regalado, insistió en que Gustavito pudo haber sido atacado y adelantó que, para resguardar el parque, solicitó al director de la policía disponer de agentes para vigilar los alrededores.

“Ese es el informe que recibí de los veterinarios y los biólogos y (la versión del ataque) es una de las cosas que todavía tienen que seguirse investigando hasta llegar a aprobarla o descartarla”, declaró Regalado el jueves.

Duras críticas

Para el analista y profesor universitario Roberto Cañas, las vacilantes declaraciones de las autoridades sobre la muerte del hipopótamo han presentado ante el mundo una “mala imagen” de los salvadoreños.

“Aquí estamos expuestos a horrendos crímenes, pero lo de Gustavito tiene un matiz grave porque era el espécimen insignia del parque, en un país pobre donde el zoológico es la máxima diversión popular de los niños de sectores pobres”, reflexionó Cañas.

Para el presidente de la organización no gubernamental Unidad Ecológica Salvadoreña (Unes), Mauricio Sermeño, se lanzó “una mentira internacional” porque decir que sufrió un ataque “fue algo inverosímil”.

Las autoridades “deben pedir disculpas públicas y dar la versión correcta del deceso”, estima Sermeño, quien considera inconveniente el cierre del parque, como algunos han recomendado hacer frente a la andanada de críticas.

“El zoológico presenta una situación precaria, no hay suficientes recursos, lo que se puede hacer es reestructurar el parque y darle más apoyo para el mantenimiento de las especies”, precisó el ambientalista.

Suplementos digitales