Q Virtual, un proyecto de Q Galería, se inauguró con la muestra ‘Convivencias’. Foto: Cortesía de Byron Toledo
El mundo virtual se ha convertido en uno de los mejores aliados de los espacios artísticos y culturales durante la pandemia. Varias galerías de arte del país lo han usado como una alternativa para mostrar al público el trabajo de los artistas.
Una de las apuestas más interesantes es la de Q Galería que, la semana pasada, inauguró Q Virtual, una sala de exposiciones en línea que recrea la experiencia del espacio físico.
La propuesta se inauguró con la exposición ‘Convivencias’, que reúne el trabajo de estudiantes de la carrera de Artes Visuales de la Universidad San Francisco de Quito, en la que se habla sobre las relaciones de los cuerpos en el mundo contemporáneo.
Como sucede en la mayoría de exposiciones de arte que se realizan de manera física, la visita a esta muestra incluye una especie de cédula virtual, a través de la cual se puede conocer el nombre del autor de la obra y detalles de la pieza.
En el recorrido por esta galería, el visitante se puede encontrar con obras en distintos formatos entre ellos esculturas, fotografías y pinturas. Para Byron Toledo, el director de este espacio, Q Virtual es una muestra de cómo se pueden expandir las posibilidades expositivas del arte local. “El 4 de agosto habrá una visita guiada virtual, en la que participarán los artistas”, cuenta.
Por su parte, la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE) creó la Galería Nacional Virtual, un espacio menos inmersivo en términos tecnológicos, pero que se ha convertido en otra alternativa para que las personas conozcan el trabajo de los artistas ecuatorianos durante esta pandemia.
Cada exposición, a la que se puede acceder a través de la página web de la CCE, incluye un texto introductorio escrito por Juan Sigüenza, el curador del espacio, que reseña la vida y obra del artista, y una serie de obras seleccionadas.
Entre los artistas que han expuesto su obra en este espacio está Jorge Velarde, uno de los miembros del colectivo La Artefactoría. En ‘Metamorfosis de la memoria’ se incluyeron varias obras que realizó durante la pandemia, la mayoría trabajadas con tinta china, acuarela y acrílico.
Otra de las galerías que decidió apostar por el mundo virtual es Violenta. David Orbea y Juan Carlos Vargas, los directores de este espacio que se abrió hace tres años en el sur de Guayaquil, decidieron lanzar Tiempos violentos. Se trata de una propuesta digital para incentivar la compra de arte, sobre todo de artistas jóvenes y emergentes.
Estos artistas decidieron convertir las cuentas de Instagram y Facebook de Violenta en una especie de galería virtual. A través de estas redes sociales han logrado que el público, sobre todo, guayaquileño, acceda a la obra de artistas como Brenda Vega, Pedro Sánchez o Gabriela Serrano.
Orbea cuenta que, en su primera etapa, Tiempos Violentos permitió que la gente accede al trabajo de estos artistas, a través de historias en las que se contaba sus vivencias y su producción artística durante el confinamiento.
“La gran sorpresa que tuvimos es que esta forma de exhibir el trabajo de los artistas tuvo acogida y se vendieron muchas obras”, cuenta Orbea. Su proyecto se mantendrá activo para activar también el mercado del arte guayaquileño.