Venta de comida rápida en los exteriores de las universidades. Foto: El Comercio
Una hamburguesa que contiene carne, salchicha, queso y huevo puede aportar al menos entre 1 000 y 1 200 calorías.
Justamente los locales que la expenden la han bautizado con el nombre de ‘completa’, por sus componentes. Esa cantidad de energía se obtiene sobre todo si viene con papas fritas y gaseosa.
Este tipo de alimentación es común entre los universitarios. Dos nutricionistas y docentes: Nancy Flores y Miriam Andrade coinciden en que para mantenerse saludable una persona promedio debe mantener una dieta de entre 1 500 y 2 000 calorías al día. Esto incluye proteínas, frutas y verduras cinco veces diarias.
Juan Carlos Flor acudió en julio pasado al médico, luego de terminar el primer año de su carrera. Se sentía decaído y con sueño constante.
El galeno -cuenta el joven de 22 años- le informó que debía comer más verduras, frutas y proteínas ya que tenía sobrepeso y eso incidía en su problema.
Al entrar a la universidad dejó de comer las ensaladas que preparaban en su casa e ingería más papas fritas y hamburguesas. Inicialmente pesaba 72 kilos y tras un año subió a 75,5.
Este Diario hizo un recorrido alrededor de las universidades Católica, Salesiana y Politécnica Nacional. De 11 jóvenes consultados, nueve no regresan a casa a almorzar por los horarios de clases o porque estudian y trabajan. Tienen, en promedio, 30 minutos para comer y 10 cuentan con no más de USD 2 para su almuerzo.
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2013 del Ministerio de Salud y el INEC, en Ecuador el 29,2% de la población de 5 a 59 años consume excesivamente carbohidratos y un 6% grasas. La muestra fue de 92 502 personas.
La prevalencia de sobrepeso y obesidad -señala este documento- es del 60% en hombres y el 65,5% en mujeres, que empieza a aumentarse desde los 19 años, cuando comienzan universidad.
Nancy Flores, nutricionista, cree que la malnutrición se agrava en esta etapa, aunque la Organización Mundial de la Salud alerta que el inicio del sobrepeso y obesidad se da ya en la niñez.
La Universidad de la Frontera, en Chile, reveló en un estudio de julio pasado, que los universitarios suben 1,75 kilos en promedio tras cuatro años de evaluación. Miriam Andrade, coordinadora del área de Nutrición de la U. Católica de Quito, cree que en sus hábitos alimenticios influye el estrés, el tiempo y el costo.
El psicólogo Alejandro Pérez añade que la ansiedad hace que tengan hambre en exceso y busquen alimentos que sacien y les proporcionen energía.
Para la nutricionista Flores, la comida rápida brinda más combustible del necesario y acarrea problemas de salud: el sobrepeso y la obesidad desencadenan diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares y del metabolismo.
Según el diabetólogo Gerardo Armendáriz, el problema se inicia a edad temprana y por la falta de actividad física las secuelas se ven en la adultez y vejez.
Los especialistas recomiendan un plan de enseñanza sobre nutrición en casa y en las universidades.