Diana de Gales, la princesa que reinó en el corazón de su pueblo
En el Palacio de Kensington, en Londres, se realizan distintos homenajes en memoria de la princesa Diana. Foto: EFE
La princesa Diana de Gales “era como una niña grande”. Así recuerda el príncipe Enrique de Gales a su madre, en una declaración recogida en un documental realizado por la BBC, cuando se cumplen 20 años de la trágica muerte de la princesa británica.
Pero antes de convertirse en la ‘Reina de Corazones’, era simplemente conocida como Diana Frances Spencer. La cuarta hija de John Spencer y Frances Roche, nacida en Sandringham, Inglaterra, en 1961. Familia que pasó a formar parte de la nobleza cuando su padre heredó el título de conde en 1975.
Se educó en varias instituciones mientras se dividía el afecto de sus padres, divorciados en 1969. Aunque no obtuvo un título universitario, se le conocía una fuerte vocación por las artes, especialmente por la danza. Su herencia nobiliaria le permitió moverse en los círculos de la alta sociedad inglesa, donde conoció al príncipe Carlos de Gales.
Un hombre 13 años mayor que ella, con quien terminó comprometiéndose y casándose en una majestuosa boda celebrada en la Catedral de San Pablo, el 24 de febrero de 1981. Una vez que la Familia Real aceptó su entrada, dejando pasar algunos detalles de su pasado familiar.
A partir de ese momento, no solo se convirtió en Su Alteza Real la princesa Diana de Gales, sino además en una de las figuras públicas más importantes de Inglaterra. Sus trajes casuales de soltera se transformaron en elegantes y sofisticados atuendos, al mismo tiempo que se fue adaptando a las normas de etiqueta y protocolo de la Casa Real.
Un año después de la boda, la Familia Real extendía su legado con el nacimiento de William Arthur Philip Louis, conocido como el príncipe Guillermo de Gales, segundo en la línea de sucesión al trono. Dos años más tarde, la princesa daba a luz a su segundo hijo, Henry Charles Albert David o príncipe Enrique de Gales.
A la luz pública, la figura de Diana de Gales era la de una madre amorosa, una esposa considerada y una mujer noble y caritativa. Desde su privilegiada posición en la realeza respaldó causas humanitarias y trabajo en un sinnúmero de organizaciones benéficas como la Asociación Británica para Sordos, Cruz Roja, Real Academia de Música.
Sin embargo, su relación conyugal se fue deteriorando entre rumores de deslices amorosos de la pareja y la presión de la opinión pública. El matrimonio real llegó a su fin después de 15 años, en febrero de 1996.
Un año más tarde el mundo lamentaba la muerte de Lady Di en un accidente de tránsito en un túnel de París, junto a su novio Dodi Al-Fayed, mientras huía de un grupo de paparazzis que intentaban fotografiarlos. A 20 años de su muerte, Diana aún vive en el corazón de su pueblo, que la llegó a conocer como la 'Reina de Corazones'.