El Ministerio del Ambiente, el Parque Nacional Galápagos y el Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos aclararon por medio de un comunicado que “el uso del arte de pesca conocido como palangre está prohibido dentro de la Reserva Marina de Galápagos”. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
“Todo el mundo protesta contra la pesca japonesa de ballenas con fines científicos. En Galápagos vergonzosamente hacemos lo mismo permitiendo el uso del palangre para estudiar sus efectos”.
Así lo dijo el pasado martes 6 de marzo del 2018, el ecologista Roque Sevilla a través de su cuenta de Twitter, al referirse a una investigación que se estaría realizando en el archipiélago de Galápagos, para analizar los efectos de la pesca con palangre (o long line). La misma preocupación la replicaron otros defensores del ambiente en sus redes sociales.
El palangre es un arte de pesca artesanal que se coloca en el fondo del mar o que flota y contiene varios anzuelos que cuelgan de una línea principal, y es considerado un peligro para la conservación de las especies. Según la organización Greenpeace, este método atrapa tiburones en peligro de extinción, tortugas, mamíferos marinos y aves marinas que suelen enredarse entre los anzuelos.
La tarde de este jueves 8 de marzo del 2018, el Ministerio del Ambiente, la Dirección del Parque Nacional Galápagos y el Consejo de Gobierno de las islas emitieron un comunicado al respecto.
Estas entidades indicaron que el uso de este arte de pesca “está prohibido dentro de la Reserva Marina de Galápagos” según el Acuerdo Ministerial 173 del 8 de diciembre del 2008. “Nunca ha existido autorización por parte de la autoridad ambiental, ni del Consejo de Gobierno para su uso”.
Desde el lunes pasado, se difunden en redes sociales imágenes de lobos marinos que fueron alcanzados supuestamente por anzuelos de este tipo de pesca, en Galápagos.
La investigación a la que hacen referencia los ecologistas es un proyecto denominado Evaluación de artes de pesca experimentales para la captura sostenible de peces pelágicos grandes en la Reserva Marina de Galápagos.
Esta es una propuesta de investigación para el estudio de artes de pesca experimentales dirigidas a la captura sostenible de peces pelágicos dentro de la Reserva Marina de Galápagos. Otro de los objetivos era encontrar una alternativa de pesca sostenible que favorezca a quienes se dedican a la pesca en la región insular.
En el documento -que data de agosto del 2016 y que menciona al Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca y otras instituciones como participantes- se indica que el plan de ese trabajo tendría una duración de tres años. Es decir, que continuaría en ejecución con lo que se denominan “lances de pesca comprobatoria”, según señala este proyecto.
En el comunicado se indica que este proyecto es observado mensualmente por un Comité Técnico de Muestreo que “evalúa el funcionamiento de las artes de para revisar su funcionamiento y encaminarlas a los fines con las que fueron propuestas: rentabilidad, evitar el impacto de especies no objetivo, disminuir los gastos operativos y el esfuerzo pesquero”.
Las autoridades aseguran que desde el Parque Nacional Galápagos se supervisa la implementación de este proyecto de investigación. Desde este organismo, se indicó, se deberá evaluar los resultados de este informe y solo si es que se cumplen con los objetivos iniciales se dará continuidad al estudio.