El covid-19 cambió el modo de ver y vivir la ciudad

A la salida de una entidad bancaria, en el norte de Quito, una mujer toma un taxi apresurada. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

A la salida de una entidad bancaria, en el norte de Quito, una mujer toma un taxi apresurada. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

A la salida de una entidad bancaria, en el norte de Quito, una mujer toma un taxi apresurada. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

Algunas miradas hablan, lo dicen casi todo. La incertidumbre se apoderó de la gente desde el 12 de marzo de 2020, día en que se declaró la emergencia sanitaria tras registrarse en el país los primeros casos de personas contagiadas con el covid-19. En las principales vías de Quito, los ciudadanos buscan la forma de protegerse, algunos con mascarillas, otros con guantes y gorras, mientras tratan de llevar su vida, dentro de las nuevas reglas que ha impuesto el coronavirus en el mundo.

Una repartidora de alimentos a domicilio circula en su bicicleta por la av. Naciones Unidas. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

Con las protecciones necesarias, un joven transita por la calle Alpallana, en el centro norte de Quito. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

Una pareja apresura el paso en el parque La Carolina, antes de que empiece el toque de queda. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

Pocas unidades de transporte circulan en la ciudad y los usuarios deben llevar mascarillas al utilizarlas. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

Suplementos digitales