Imagen referencial. Los relojes con alarma han estado presentes en la historia desde hace mucho tiempo. Foto: Flickr / Phalinn Ooi
Si usted es de las personas a quienes les cuesta levantarse temprano por las mañanas, probablemente utilice con frecuencia la opción para posponer la alarma en su dispositivo móvil, también conocida como ‘snooze’. En este caso, tal vez habrá notado que la alarma volverá a activarse después de nueve minutos. Pero ¿Por qué nueve y no 10 minutos?
Una de las marcas que utilizan este periodo de tiempo en sus dispositivos es Apple con su aplicación de alarma en iPhones y iPads, aunque muchos teléfonos que utilizan sistema operativo Android también lo utilizan.
Según menciona el portal Gizmodo, los relojes con alarma han estado presentes en la historia desde hace mucho tiempo. Se dice que el filósofo griego Platón inventó un reloj en base a agua. Cuando los recipientes de agua se llenaban en cierto periodo de tiempo y pasaban a otro balde, atravesaba un pequeño silbato que hacía sonar el aparato.
Pero la opción de ‘snooze’ para aquellos que quieren quedarse unos minutos más en la cama, aunque sin quedarse dormidos toda la mañana, apareció en 1956 de la mano de la compañía tecnológica General Electric. El modelo 7H241 era un reloj mecánico en cuya parte superior contaba con un botón que permitía al usuario dormir un poco más.
Aquel modelo utilizaba también el ‘snooze’ de nueve minutos, debido a que este botón se encontraba conectado al mecanismo que controlaba los minutos en el dispositivo, según detalla la revista Business Insider. Este tipo de despertadores funcionaba con tarjetas que cambian cada vez que pasa un minuto; cuando pasan 10 minutos, la tarjeta que indica las unidades vuelve a cero. Por lo tanto, la opción para controlar el ‘snooze‘ debía ser de menos de 10 minutos y así quedó el consenso de dejarlo en nueve.
Con la posterior aparición de los relojes digitales y el ‘boom’ de los teléfonos celulares que han reemplazado en gran parte a estos aparatos, la configuración de los nueve minutos para la alarma se ha quedado debido a un “estándar nostálgico”, asegura el experto en dispositivos Apple Andrew Stack al diario británico Metro. Esto quiere decir que el periodo de tiempo es una suerte de homenaje al desarrollo de despertadores análogos durante las décadas pasadas.