Foto referencial. Los futbolistas de Argentina decidieron ayer, 2 de marzo del 2017, mantener la huelga iniciada en reclamo de una millonaria deuda salarial . AFP
Los futbolistas de Argentina decidieron ayer, 2 de marzo del 2017, mantener la huelga iniciada en reclamo de una millonaria deuda salarial, pese a la presión delos clubes y el Gobierno para que los torneos se reanuden este fin de semana.
“No va a haber fútbol”, dijo a la prensa el secretario general del gremio Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA), Sergio Marchi, tras reunirse con los capitanes de los equipos. Marchi explicó que mientras los clubes no paguen la deuda de 260 millones de pesos (USD 16 millones), los futbolistas no saldrán a la cancha para reanudar los torneos, interrumpidos desde mediados de diciembre pasado.
La de Argentina es la única liga en el continente que todavía no retomó la actividad. “El reclamo es justo. No estamos pidiendo aumento ni un bono de fin de año. Sino que se le paguen salarios adeudados”, agregó Marchi. Casi al mismo tiempo que el jefe del sindicato de jugadores declaraba a los periodistas, la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) intimó a los clubes, bajo la amenaza de sancionarlos, a que presenten a sus equipos “en los días y horarios” designados para reiniciar los certámenes este fin de semana.
“Vamos a presentar un equipo. Si no es (el de) la Primera (División)serán los juveniles”, anunció el presidente de Lanús, Nicolás Russo. Otros dirigentes abrieronhoy la posibilidad de recurrir a los jugadores de su cantera para disputar los partidos este fin de semana. Representantes de FAA y AFA, en tanto,se reunirán este viernes en el Ministerio de Trabajo para hallaruna solución al conflicto.
El Ministerio de Trabajo dictó hoy una medida de “conciliación obligatoria” para exigir a que las partes en disputa encaren una negociación durante 15 días, plazo en el que ninguna podrá tomar medidas de fuerza ni aplicar sanciones. Al ratificar la medida de fuerza, los futbolistas desestimaron la medida gubernamental.
Este jueves, 2 de marzo del 2017, el Gobierno resolvió pagar a la AFA 350 millones de pesos (unos USD 22,4 millones) correspondientes a la rescisión del contrato de televisación “Fútbol para Todos”, vigente desde 2009 y por el cual el Estado disponía de los derechos del fútbol argentino.
La AFA debe transferir el dinero a los clubes para que paguen los salarios a jugadores y empleados, pero en algunos casos la suma todavía no alcanza a cubrir la deuda. Por ese motivo, dirigentes de las principales entidades decidieron aportar dinero propio a un fondo común y así completar lo exigido por los futbolistas.
La Primera División argentina disputa un torneo de 30 fechas, que entró en receso a mediados de diciembre por las fiestas de fin de año y tenía previsto reanudarse el 12 de febrero. Pero la decisión del Gobierno argentino de terminar el contrato de televisación y la falta de acuerdo con empresas privadas para la difusión de los partidos dejó al fútbol sin una de sus principales fuentes de ingresos.
Muchos clubes medianos y pequeños dependen de estos fondos para sobrevivir, ya que su recaudación en los partidos y la publicidad no alcanzan para cubrir sus gastos mensuales. Además, la mayoría de los clubes tienen sus finanzas en rojo y sólo unos pocos tienen sus cuentas en orden y logran financiarse sin depender del dinero de la televisación.
La situación es más grave en los clubes de la segunda división y categorías inferiores. Mientras tanto, la AFA negocia contrarreloj con varias empresas de medios internacionales los derechos de televisación del fútbol. Fox/Turner, ESPN y Mediapro realizaron ofertas, pero los dirigentes, que iban a resolver el ganador la semana anterior, todavía no definieron tema.