Juliana García es la presidenta de la Asociación Ecuatoriana de Guías de Montaña. Foto tomada de la cuenta Facebook de la deportista
Con la apertura de cumbres de alta montaña como Cotopaxi, Antisana, Ilinizas, Corazón, Carihuairazo, Tungurahua y Altar, los 160 guías certificados de la Asociación Ecuatoriana de Guías de Montaña (Aseguim) esperan reactivarse.
Durante casi seis meses, desde mediados de marzo del 2020, la mayoría de estos profesionales no pudieron trabajar al aire libre en los páramos y en las altas cumbres, como consecuencia de las restricciones adoptadas para evitar más contagios de Covid-19 en Ecuador.
Juliana García, presidenta de la Aseguim, es positiva y espera que entre octubre y diciembre se normalice la apertura de todas las áreas protegidas en el país. “Nuestro pedido ha sido que se abran todas las cumbres, para todos. Que se abran las áreas protegidas para el público en general, para que los guías podamos trabajar y para que los andinistas puedan hacer su deporte”.
¿Cómo afectó esta pandemia a los guías?
“Han sido seis meses sin poder trabajar, por eso el pedido urgente de la apertura de las áreas protegidas. Nosotros trabajamos por temporadas. Acabamos una en febrero, de ahí generalmente tenemos un receso de un par de meses pero luego ya perdimos la opción de trabajar en junio, julio y agosto. Esperamos poder recuperar en la siguiente temporada, entre octubre, noviembre y diciembre. Esto ha sido un gran impacto para los guías y sus familias que han tenido que buscar otras fuentes de ingresos. Nuestro pedido es que se autorice la apertura de todas las montañas para el público en general”.
¿Están dadas las condiciones para volver a las montañas?
“100%. Nosotros decimos, si se abren los cines del país por qué no la montaña. En el cine estás en un espacio cerrado y en la montaña estás en un espacio abierto, mantenemos la distancia, la propia actividad involucra estar con tres, cuatro personas en una área abierta”.
¿Son distintos los turistas de acuerdo a cada temporada?
“Básicamente es el mismo turista. Trabajamos un 70% con personas extranjeras y un 30% nacional. En estos momentos se va voltear un poco esa estadística. Es un turismo de gente que quiere estar en las alturas, en las montañas. También hay empresas extranjeras que están a la espera de una mayor apertura para poder enviar a turistas que quieren venir al país”.
¿Cuáles son los sitios más visitados?
“El Cotopaxi es el sitio emblemático, seguido por Chimborazo, Cayambe, Antisana e Ilinizas”.
¿Para llegar a estas cumbres se requiere de una experiencia previa?
“Correcto. Como guías y como agencias valoramos a los clientes que quieren subir. También observamos si están aclimatados y su condición física, una vez que están con nosotros. Se requiere cierta experiencia, pero es bastante fácil en una salida previa saber y medir si estas personas van a poder hacer las cumbres o no”.
¿Cuáles son sus protocolos?
Parte de nuestros protocolos de bioseguridad es lo que se aplica a nivel mundial, el distanciamiento, la mascarilla de que no exista el distanciamiento suficiente, higiene en todo momento, toma de temperatura y un monitoreo constante de los pasajeros en el día a día. Se trata también de minimizar el contacto con otros grupos, con la utilización de carpas en lugar de refugios, minimizando el contacto en general”.
¿Qué hace un guía?
“El guía de montaña es la persona que está certificada para realizar actividad turística y velar por la seguridad de la gente que sube a las altas montañas y escala en roca”.
¿Cuantas cumbres están consideras como alta montaña en el país?
“Altas montañas, sobre los cinco mil metros, hay 16. Con glaciar, donde igual realizamos parte de nuestra profesión hay siete. El 80% de nuestra actividad profesional está en esas montañas”.
Juliana García, montañista ecuatoriana.