Geoff Cameron (der.) del Stoke City’s pelea el balón con Chris Smalling durante el partido del Boxing Day de la Premier League jugado en el Britannia Stadium en Stoke-on-Trent. AFP
El Stoke City le dio un nuevo golpe al Manchester United, al vencerlo el sábado 26 de diciembre del 2015, por 2-0 y complicar el futuro de Louis van Gaal al frente de los
“Red Devils”, en el inicio de la decimoctava fecha de la Premier League.
El equipo dirigido por Van Gaal ganó sólo uno de sus últimos siete partidos, por lo que la situación del entrenador es cada vez más comprometida y la prensa inglesa especula desde hace varios días con su destitución.
Cuando lo consultaron sobre su futuro tras el partido, el técnico volvió a molestarse y se marchó sin responder, algo similar a lo vivido el miércoles, cuando abandonó una rueda de prensa cuando le preguntaron por su posible despido.
Louis van Gaal (tercero der.) DT del Manchester United después del partido ante el Stoke City. AFP
Para colmo, la de hoy fue la cuarta derrota consecutiva tomando todas las competiciones, situación que el United no vivía desde 1961. “Es una racha terrible, que nos deja una sensación horrible”, dijo el mediocampista Michael Carrick. “Duele mucho. Es difícil de digerir. No estamos jugando lo suficientemente bien en este momento y tenemos que asumir la responsabilidad por ello”, añadió.
Bojan Krkic adelantó al Stoke a los 19 minutos y el austríaco Marko Arnautovic aumentó la ventaja a los 26′, ante un rival que no mostró respuestas a lo largo de casi todo el juego. El
exjugador del FC Barcelona abrió la cuenta después de un grosero error del holandés Memphis Depay, que dejó corto un balón con un golpe de cabeza y permitió que Glen Johnson robara y cediera atrás para la entrada libre de Bojan.
Apenas siete minutos después, Arnautovic aumentó la ventaja con un gran gol a la salida de un tiro libre: el internacional austríaco capturó un rebote en la barrera y batió al arquero español David de Gea con un preciso remate desde afuera del área.
La fórmula atacante del Stoke estuvo a punto de sentenciar antes del final del primer tiempo, cuando Bojan habilitó a Arnautovic, pero el austríaco se precipitó en la definición y falló ante De Gea. La segunda parte mostró a un Manchester United más volcado a la ofensiva, pero sin ideas para vulnerar el vallado defensivo del Stoke. La cara de Van Gaal en el banquillo era toda una declaración de lo que estaba sucediendo en el campo.
A esa altura, el entrenador había mandado al campo en lugar de Depay al astro Wayne Rooney, que por decisión táctica no había jugado la primera mitad y que tuvo la ocasión más clara de su equipo, aunque el arquero Jack Butland evitó el gol. “Jugar así contra un equipo como el Manchester United es absolutamente brillante para nosotros y sirve para mostrar lo que somos”, afirmó Butland. “Sabíamos que si conseguíamos el primer gol podíamos mandar y ganar el partido”, agregó.
Con esta victoria, la segunda en los últimos 16 partidos con el United, el conjunto conducido por Mark Hughes llegó a
26 puntos y se ubica en la octava posición, mientras que el equipo de Van Gaal se mantiene sexto con 29, fuera de la zona de competiciones europeas.
La tradicional jornada del “Boxing Day” de la Premier League continua con nueve partidos, entre los que se destaca la visita del líder Leicester al Livepool y la del escolta Arsenal al Southampton.