Renny Folleco, Aníbal Chalá y Nicolás Freire (de espaldas y con el balón), durante un entrenamiento de los universitarios en Pomasqui. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Hay una sensación agridulce en Liga por los cinco meses de campaña del equipo. Por una parte, el objetivo institucional de clasificarse a los octavos de final de la Copa Libertadores se cumplió, en una serie difícil y en la que el cuerpo técnico estuvo incluso a punto de bajar los brazos.
Sin embargo, los albos se clasificaron a octavos y en julio se verán con Olimpia. Pero en el torneo local, los albos siguen mostrando lagunas: ocupan el sexto puesto con 21 unidades y más partidos empatados (6) que ganados (5). La ‘U’ ha caído en tres ocasiones: ante Macará en Ambato (3-0), ante Aucas en el Rodrigo Paz (1-0) y ante Delfín SC hace 15 días en el estadio Jocay de Manta (2-1).
Este sábado, a las 15:00, los dirigidos por Pablo Repetto visitarán a Fuerza Amarilla, un equipo que realiza esfuerzos indecibles para sostenerse en el fútbol de élite. Sus debilidades estructurales van de la mano con su campaña: el cuadro machaleño es el penúltimo de la tabla con 8 puntos y un escalofriante gol diferencia de -21.
El duelo sabatino es el último que realizarán los universitarios antes de la paralización del torneo por la Copa América.
Por ello, en la tienda azucena hay ansias de redención; sobre todo luego de la última presentación del equipo que se saldó con un 2-2 ante Deportivo Cuenca. En dicho encuentro, el equipo adoleció de problemas defensivos: Aníbal Chalá se dejó ganar la espalda del diminuto Johnny Uchuari (1,63 metros) que cabeceó desde el filo del área y encontró adelantado a Adrián Gabbarini en el primer gol. En el segundo, anotado por Emmanuel Martínez, ‘Gabba’ no ordenó la colocación de una barrera y se quedó reclamando a sus compañeros, tras el estupendo remate del mediocampista argentino.
“Se cometieron errores, pero ahora vamos a Machala a intentar recuperarnos. Fuerza Amarilla es un equipo que ha tenido complicaciones, pero seguramente nos presentarán problemas”, dijo Chalá.
El lateral pasó de ser ignorado por el cuerpo técnico a gozar de oportunidades. El DT Repetto habló con el futbolista y le pidió aprovechar los chances que habrá durante un año lleno de competencias. Por ello, en Liga se imponen las rotaciones en las alineaciones.
Durante la paralización del torneo está previsto que Liga realice trabajos parecidos a los que se cumplen en la pretemporada. La intención es activar físicamente al equipo y jugar varios partidos amistosos.
En Liga hay satisfacción por la convocatoria de cuatro de sus talentos para la Copa América: Jefferson Intriago, Jefferson Orejuela, José Quintero y Andrés Chicaiza. Orejuela se mostró feliz por la convocatoria: este año, la dirigencia del club hizo un esfuerzo por retenerlo: consiguió extender el préstamo del Fluminense y le hizo una importante mejora salarial (es uno de los ecuatorianos mejor pagados de la plantilla). “Uno siempre intenta defender al equipo en el que trabaja y darlo todo. Tengo mentalidad ganadora y lo he aplicado aquí y también espero seguir haciéndolo en la Selección”, dijo ‘Ore’ a Liga TV.
En cambio Intriago, otro de los convocados, sigue entrenándose con el equipo. El coordinador Santiago Jácome dijo que en la Ecuafútbol y en el Ministerio de Trabajo constan los contratos que certifican que él tiene un acuerdo con Liga hasta finales del 2020. Por tanto, Tigres de México no podría llevárselo a mitad de año, como pretendía.