Festejo de los jugadores del Aucas luego de su ascenso a la Serie A. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Redacción Deportes
Tras el empate 1-1 entre Aucas y Liga de Portoviejo, los dirigidos por Juan Ramón Silva celebraron en el camerino sur del estadio Olímpico Atahualpa.
Los familiares de los jugadores esperaron en el hall del estadio, para compartir con ellos. Los parientes de los jugadores foráneos Lauro Cazal, Jerónimo Costa, Federico Alonso y Víctor Gómez aguardaron más de media hora para poder abrazarlos.
“Hay que reforzar este equipo querido para el próximo año. Si la hinchada que hoy (16 de noviembre) acudió al Atahualpa se une y apoya, sería un primer paso”, expresó Mauricio Pozo, ex ministro de Finanzas e hijo del legendario crack de Aucas de las primeras décadas, Gonzalo Pozo.
Luego de una extensa celebración en el camerino sur del Atahualpa, los jugadores junto a los directivos, abordaron el autobús que los condujo al escenario de El Batán, para retornar a la concentración del club, en el estadio Gonzalo Pozo Ripalda, en donde les tenían preparado un almuerzo.
“Allí tendremos una celebración más íntima, agradeciendo a quienes nos han ayudado y apoyado en esta temporada”, contó Cazal desde una ventana del bus, mientras varios hinchas coreaban el ‘Ídolo hay uno solo’ en los exteriores del automotor.
Aucas volverá a sus entrenamientos el próximo martes (18 de noviembre) para planificar su partido frente a Espoli del próximo domingo (15:00) en Santo Domingo y con Deportivo Azogues, el domingo 30 de noviembre (11:30) en el estadio Gonzalo Pozo, con el cual finalizará su temporada en la Serie B.
Los hinchas, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes tienen previsto realizar ese día las celebraciones del regreso a Serie A.