Una imagen del de 8 de marzo del 2020 de los jugadores del Bayern Munich Thomas Mueller (der) y Philippe Coutinho en la Bundesliga. Foto: AFP
La primera tanda de test generalizados del nuevo coronavirus revelaron diez casos en los clubes alemanes de fútbol, lo que subraya los retos sanitarios a los que debe hacer frente la Bundesliga para obtener el miércoles 6 de mayo del 2020 el visto bueno del poder político para su reanudación a mediados de mayo.
Oficialmente, la Liga Alemana de Fútbol (DFL) celebró estos resultados: de los 1.724 test efectuados a los 36 clubes de primera y segunda división, 10 dieron positivo.
“Los test realizados en los últimos días alcanzaron su objetivo: garantizar la seguridad y proteger todo lo bien posible a los jugadores antes de una infección en el entrenamiento o un partido”, señaló la DFL en un comunicado.
Hasta ahora, únicamente el Colonia había anunciado públicamente, el pasado viernes 1 de mayo del 2020, que dos jugadores y un preparador físico habían dado positivo. Los otros miembros del equipo fueron puestos en aislamiento en un hotel y el club renano informó este lunes que todos ellos habían dado negativo, por lo que consideraba que podía proceder a un entrenamiento.
La DFL no dio información, ni los nombres de los jugadores o de los clubes, sobre los otros casos detectados.
El miércoles, la canciller Angela Merkel y los presidentes de los Länder (Estados regionales) deben hablar por videoconferencia y dar un eventual aval a la reanudación de la competición a puerta cerrada.
En principio, todo parece preparado para que así sea. El domingo, el ministro del Interior, Horst Seehofer, disparó el optimismo de los hinchas y los clubes al declarar que el calendario propuesto por la DFL era “ plausible ” y trasladar su apoyo a una reanudación en mayo.
El peligro puede estar en los detalles. Según los reglamentos en vigor en Alemania, toda persona que haya tenido contacto con un caso positivo debe estar en situación de aislamiento durante catorce días.
Ese protocolo y los casos detectados, o lo que se puedan detectar próximamente, puede suponer un problema para la reanudación de la competición. El lunes, el Ministerio del Interior confirmó que el fútbol no será ajeno a las reglas en vigor en Alemania.
“ Horst Seehofer (el ministro del Interior) se mantiene en lo dicho. Las personas que han estado en contacto directo con una persona que ha dado positivo deben entrar en una cuarentena de catorce días ” , declaró el portavoz del Ministerio, Steve Alter.
“ Ese es un principio que vale para toda la población y no existe ninguna razón para que sea diferente para los futbolistas profesionales ” , añadió el portavoz.
El protocolo propuesto por la DFL para retomar el campeonato contempla que las personas que den positivo queden apartadas, pero da a entender que el resto del plantel pueden continuar entrenando si sus pruebas (dos por semana según la previsión) han dado negativo.