La estadounidense Abigail Forbes se llevó el título invidividual femenino tras ganar a su compatriota Emma Jackson. Foto: Manuel Quizhpe/EL COMERCIO
Unos 150 espectadores asistieron ayer a las instalaciones del Cuenca Tenis y Golf Club para las finales del Mundial Juvenil de Tenis, en damas y varones. El sol acompañó a los finalistas: tres estadounidenses y un italiano.
La final femenina se disputó entre las estadounidenses Abigail Forbes y Emma Jackson. Desde el inicio, Forbes mostró solidez en el juego. De esa manera ganó el primer set 6-2 y sin desmayar en sus remates cruzados volvió a ganar 6-2. Así, con un claro 2-0, se adjudicó el título.
Forbes, de 17 años, sumó 280 para el ranking ITF; mientras que Jackson, con el subtítulo, acumuló 170. Las semifinalistas en singles, entre ellas la ecuatoriana Mell Reasco, acumularon 100 puntos.
La campeona ayer contó con el apoyo de su madre Denise Haioson. La semana pasada también estuvo con ella en Costa Rica, donde alcanzó un título. Forbes, luego del encuentro, posó para los fotógrafos y aficionados.
La campeona no ocultó su satisfacción por la victoria y destacó el nivel técnico que presentó su compatriota durante el partido y en el torneo. La felicitó por llegar a la final y expresó que espera disputar otro título con su adversaria.
La campeona jugó en Cuenca por primera vez y aseguró que los dos primeros días le resultó difícil adaptarse a los 2 500 metros de altitud de nivel sobre el mar. Sin embargo, desde los cuartos de final se sintió cómoda en la ciudad.
La tenista retornará mañana a su país para descansar una semana y retomar las competencias nacionales.
Jackson, por su parte, reconoció la superioridad de su compatriota. Eso sí, anticipó que espera tomarse la revancha en próximos torneos.
Ambas recibieron regalos de los patrocinadores, así como los trofeos como las dos más destacadas del Mundial.
En varones, la final la disputaron el estadounidense Dali Blanch, siembra seis del torneo, y el italiano Flavio Cobolli, siembra nueve.
El primer set favoreció al representante americano (6-3). En el segundo set triunfó el europeo (6-2).
Entonces se fueron al tercer set. Ahí, el italiano de 16 años se mostró más sereno y sacó puntos claves para la victoria de 6-2. De esa manera se proclamó campeón en singles y acumuló 280 puntos para el ranking ITF.
Los juegos de dobles se disputaron el viernes, en una maratónica jornada. Cada jugador actuó en tres juegos.
En damas, la dupla conformada por la israelí Shavit Kimchi y la eslovaca Michaela Kadleckova superó en dos sets (6-3, 6-2) a la pareja integrada por la ecuatoriana Mell Reasco y la colombiana Antonia Samudio.
Reasco, quien se convirtió en la mejor representante de Ecuador entre los 16 tenistas nacionales inscritos en el cuadro principal.
Ella aparecerá la próxima semana entre las 200 mejores del escalafón ITF. Ella sumó 100 puntos al clasificar a la semifinal individual y 130 puntos al terminar como vicecampeona en dobles.
En la final de dobles varones, los estadounidenses Mark Mandlik y Adam Neff vencieron a los brasileños Gustavo Heide y Joao Victor Loureiro, con parciales de 4-2, 5-4 (2). Los jugadores con mejores arrestos físicos pudieron imponerse en la final.
El Mundial juvenil arrancó el lunes pasado con 128 tenistas de 26 países, inscritos en el cuadro principal.
Las constantes lluvias afectaron los tres primeros días de competencia; sin embargo, se logró equilibrar la programación de singles hasta el jueves.
Según Marcelo Calderón, director general del certamen internacional, este año llegaron tenistas de mejor nivel con relación al año pasado.
Reconoció que el ranking mundial no es un termómetro absoluto para destacar a los favoritos. Puso como ejemplo el caso de Reasco, quien ganó a la siembra tres del torneo, pero no pudo con la cinco.
La mayoría de competidores se dirigieron Colombia y Brasil para continuar sus participaciones en torneos ITF 1.
En otros casos, decidieron hacer un receso a sus actividades. Reasco, por ejemplo, representará al Ecuador en el Grupo 1 de la Zona Americana de Fed Cup, la próxima semana en Medellín, Colombia.