El acero es protagonista en esta pérgola, en Terrazas De La Cerámica (Tumbaco). Foto: Julio Estrella/ CONSTRUIR
Para elaborar pérgolas, pasamanos, gradas, puertas, vigas y más también se utiliza el acero común en el mundo de la construcción, según el arquitecto Pedro Ordóñez.
Cuenta que para evitar oxidaciones los expertos recurren a un tratamiento específico y mantenimiento constante. Se aplica dos capas de primer y luego pintura. El tono de este último material dependerá de lo que se busque lograr.
En el proyecto Terrazas De La Cerámica, por ejemplo, los arquitectos a cargo de la obra utilizaron acero para elaborar una pérgola. También hay acero en los perfiles de las ventanas y en una extensión de área comunal, donde se destaca un horno de gran tamaño.
Todo ese material luce un tono negro mate, que combina con el resto de materiales, sobre todo, con el hormigón.
En la residencia SG, en cambio, las arquitectas Gabriela Quiñones y Carmen Serena Navarro utilizaron acero para fabricar gradas y pasamanos. Ordóñez aclara que dependiendo de los usos y necesidades se utiliza un acero con determinadas características.
El más fuerte y resistente, por ejemplo, está en las estructuras de casas y departamentos. El acero también sirve para revestir construcciones.
El arquitecto Bernardo Bustamante, por ejemplo, utilizó el acero para generar transparencia, pero también para blindar una casa de fin de semana. Cuenta que aplicó el material a manera de persianas en toda la fachada, con la posibilidad de manipularlo como un acordeón, gracias a su versatilidad. Esa característica está en el acero de calidad: es transformable y soporta elevadas temperaturas, según el ingeniero Daniel Gomezjurado.
El acero está en las gradas de la residencia SG, ubicada en Cumbayá. Foto: Galo Paguay/ CONSTRUIR
En la actualidad, la mayoría de constructores dejan al material en su estado natural para economizar dinero y para lograr a propósito ese toque oxidado, una característica del acero corten, que es novedoso en países europeos, pero que aún carece de presencia en el Ecuador por su costo.
Para lograr esa textura, cuentan los especialistas, esperan que la humedad del ambiente oxide la plancha. También se puede forzar la oxidación utilizando agua ligeramente ácida. Para que el efecto final se conserve es necesario proteger la plancha con laca-poliuretano.
Con protección también debe contar el acero que está en construcciones cercanas a la playa, por ejemplo. “El acero termina oxidándose por la presencia de sal y el oxígeno en el ambiente”. Así pues, el mantenimiento debe ser constante.