La claridad equivale a comprensibilidad. Nada de contradicciones de algunos voceros. Las palabras eruditas o técnicas tienen que ser explicadas. Con la agilidad logramos que las ideas sean garzas y no ciempiés. Hay que ir directamente al hecho.
Dicen que con el coronavirus van a llegar “hasta las últimas consecuencias”, pero no manifiestan claramente con qué medios lo combatirán, pues según el actual ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, desmintió a la antecesora, Carolina Andramuño, en cuanto a cifras de insumos; pero ella los acusó de que no le dieron lo que solicitó.
Nada de qué “van a aportar un granito de arena”, “arrimar el hombro”, “ponerse la camiseta” … queremos acción; deben aportar con el dinero suficiente para terminar con la pandemia e importar los insumos con los que no contamos, solicitar ayudar a los científicos del exterior; hechos y no tanta palabrería.
Los militares y la Policía deben hacer respetar el toque de queda. Cómo quieren que entremos a las farmacias, supermercados, mercados con guantes y mascarillas, sino hay de venta porque se agotaron o salieron de contrabando por miles a España.