La lupa de Tito

Análisis y visión del deporte. Empedernido con los ingresos y gastos en el fútbol, baloncesto, tenis...

Tito Rosales

Periodista en medios desde 1989. En el Grupo El Comercio desde 1992. De todo un poco: estudios de Marketing, fútbol y deportista aficionado. Hoy es editor deportivo. @titorosalescox

¿Qué es juego brusco para el árbitro?

Editor deportivo
Twitter: @titorosalescox

¿Qué es juego fuerte para los árbitros? Acaso están conscientes de esa definición, de cómo actuar y aplicar el reglamento y las sugerencias de la FIFA.

Pareciera que no. Frenan los partidos, a su antojo, califican choques o forcejeos entre dos jugadores como faltas... se enfrentan a, también, exacerbados futbolistas, originando que su rol de juez pase a ser más importante en la cancha, lo que es erróneo.

Esos ejemplos son comunes en el Campeonato, sin excepción, lo que origina que en ocasiones se juegue menos tiempo de lo establecido. Eso no se equilibra con los minutos adicionales que suelen extender los árbitros. El ideal es que haya una coherencia entre los jueces FIFA y los jóvenes que han sido ascendidos de escalafón, que se impongan en la cancha con autoridad, sin prepotencia; que incluyan en sus informes detalladamente los excesos de los futbolistas, entrenadores y miembros del cuerpo técnico y médico. Esa es la única forma que se transparente esta actividad o de lo contrario se repetirán capítulos de años anteriores.

La Comisión de Arbitraje, que al momento es administrada por la Ecuafútbol, está en la obligación de hacer capacitaciones permanentes con los jueces y asistentes para que el Campeonato mantenga esa independencia. También exigir que Goltv, empresa que transmite los partidos, les garantice imágenes que sostengan los informes arbitrales en caso de un litigio.

Es vital recordar las sugerencias de la FIFA en el juego brusco, en el caso de dudas, en el fuera de lugar...

El rol del árbitro, con sus informes de los partidos, tiene que ser respaldado por el Comité Disciplinario de la Cámara de Comercio, encargada de las sanciones en el fútbol, aplicando el reglamento, sin distinción de clubes, o de lo contrario esa organización perderá su objetividad.