Yasunidos demandarán a Ecuador ante la CIDH por extracción petrolera

El colectivo ecuatoriano Yasunidos anunció hoy, viernes 24 de octubre, que demandará a Ecuador ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por la negativa a celebrar una consulta popular sobre de la explotación petrolífera en una zona de la reserva natural del Yasuní, en la Amazonía.

La organización presentará el martes 28 de octubre su demanda en Washington, donde tiene su sede la CIDH, ante la que solicitará que "se declare la violación de derechos políticos por parte del Estado Ecuatoriano" contra la entidad y las más de 750.000 personas que, según el colectivo, respaldaron con su firma la celebración de una consulta popular sobre el tema.

Yasunidos organizó una recogida de firmas para pedir una consulta popular sobre la explotación petrolífera en esa zona de alta diversidad, pero el Consejo Nacional Electoral (CNE) sólo declaró como válidas 359.761 de las 583.324 necesarias, por lo que no llegó al 5 % del padrón electoral, como exige el reglamento que regula la convocatoria de estos mecanismos de participación.

Los demandantes, en un comunicado, consideran que el Estado ecuatoriano negó la solicitud de convocar la consulta "por medio de actos ilegales e inconstitucionales" y estiman que ello supuso "una violación de derechos humanos por parte del Estado", por lo que pedirán ante la CIDH "que se disponga la reparación de los derechos violados".

Según la organización, el Estado ecuatoriano no cumplió con el deber de garantizar los derechos, no adecuó "el sistema jurídico a la Convención Americana de Derechos Humanos" e incumplió derechos como los de respeto al debido proceso, irretroactividad de las normas, no discriminación, igualdad ante la ley y protección judicial.

El Parque Nacional Yasuní es una de las zonas con mayor biodiversidad del mundo y en uno de sus vértices se ha descubierto un gran yacimiento petrolero, conocido como Ishpingo Tambococha Tiputini (ITT).

La iniciativa de Yasunidos de celebrar una votación surgió después de que en agosto de 2013, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, anunciara la eliminación del proyecto Yasuní-ITT, que buscaba el respaldo económico de la comunidad internacional para no explotar el crudo de las zonas del ITT.

Según dijo entonces, el mundo "ha fallado" al no contribuir con el proyecto y anunció que la explotación petrolera en el Yasuní afectará "menos del uno por mil del Parque", que abarca un millón de hectáreas de la Amazonía, y que el aprovechamiento de las reservas del ITT representará ingresos por unos 18.000 millones de dólares.

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