Imagen referencial. Autoridades de universidades se pronunciaron ante el anuncio de la paralización de actividades laborales de los posgradistas médicos. Los estudiantes dijeron que tomarán esa medida por el incumplimiento del Gobierno ante la Ley Humanitaria. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO
A través de un comunicado, 10 autoridades de universidades cofinanciadas mostraron su respaldo al pedido de la Asociación Ecuatoriana de Médicos Posgradistas (Asemp). El gremio solicitó respuestas al Gobierno sobre la firma de sus contratos ocasionales, ítem incluido en la Ley de Apoyo Humanitario.
Adicionalmente, la agrupación anunció la paralización de las actividades sanitarias a partir del martes 15 de septiembre del 2020 en los hospitales; solo mantendrán sus labores académicas en las universidades.
Los rectores y decanos que firmaron esta carta consideran que “las medidas de hecho, que suspenden la prestación de los servicios de salud, lesionan derechos fundamentales”. Por lo que hicieron un “llamado al diálogo para que todos los actores del sistema seamos escuchados, dando prioridad a quienes han estado en primera línea, cumpliendo con los más altos estándares de calidad en formación y atención”.
Ricardo Hidalgo, rector de la UTE, es uno de los firmantes de este documento. Él aclaró a EL COMERCIO que uno de los problemas radica en que la Ley de Apoyo Humanitario tiene una serie de desfases frente a la norma de Educación Superior.
“Deja espacios poco claros para el ejercicio de la autonomía universitaria, pues quieren convertir a los posgradistas en funcionarios públicos; eso atentaría con el derecho a rotar en otros hospitales”.
Si los médicos en formación -dice Hidalgo- se vinculan a los establecimientos se afectarán los horarios de clases y prácticas externas (así los llama el reglamento respectivo), y no hay claridad en su aplicación por parte del Ministerio de Salud.
En ese contexto, una de las soluciones “es reformar esta norma para que los posgradistas autofinanciados sean considerados como becarios”.
Hildago también comentó que los posgradistas de la UTE sí asistirán a las unidades médicas, es decir, no suspenderán sus labores asistenciales.
Santiago Zúñiga, presidente de Asemp, explicó que la paralización de actividades sanitarias es una medida que se tomó debido “al incumplimiento de lo que se estipula en Ley de Apoyo Humanitario que debió ejecutarse hasta el 22 de julio del 2020”, por lo que “la única manera de frenarla es con la firma de sus contratos o con el reglamento a la ley, emitido por el Presidente, con fechas para la suscripción de los mismos y la asignación de los recursos“.
Otro de los gremios que mostraron su apoyo fue la Asociación de Facultades Ecuatorianas de Ciencias Médicas y de la Salud del Ecuador (Afeme), presidida por el galeno Leonardo Bravo. Él señaló que se ha dado seguimiento al tema y las autoridades de Gobierno no han cumplido con los requerimientos ofrecidos, por lo que apoyan el justo pedido de los posgradistas. Sin embargo solicitan que no se abandonen las actividades asistenciales en los hospitales.
“Debido a la pandemia actual pedimos que no se suspendan las atenciones de forma total. En horas de la tarde (16:00) la junta de decanos nos reuniremos para evaluar el tema”.
¿Qué dice la Ley de Apoyo Humanitario?
En la disposición octava de este cuerpo legal se contempla que “las y los médicos que, durante la emergencia de covid-19, se encuentren prestando sus servicios en los hospitales pertenecientes a la Red Integral Pública de Salud y red complementaria, en calidad de posgradistas autofinanciados y becados, se considerarán médicos en funciones hospitalarias en formación y suscribirán un contrato de servicios ocasionales, con el Ministerio Rector de la Salud o con el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), y sus respectivas redes complementarias, por el tiempo que dure sus estudios de posgrado y percibirán una remuneración correspondiente a la categoría de galenos en funciones”.
La norma se publicó en el Registro Oficial el 22 de junio del 2020.