Una multa y 7,5 puntos menos para los taxistas que no aceptan carreras

Recorrido por varios puntos de la ciudad en busca de taxis. Foto: El Comercio / Archivo.

Recorrido por varios puntos de la ciudad en busca de taxis. Foto: El Comercio / Archivo.

A buena parte de quienes usan taxis con frecuencia les ha ocurrido. Una unidad se detiene cuando levantan el brazo, señal de que necesitan el servicio. Ingresan, saludan y le indican al conductor hacia donde se dirigen. De inmediato le responden: “No, yo no voy allá”. También es común: “No, yo no voy al sur”. “A Carapungo no voy, allá roban”. “No, en la zona de la Naciones Unidas ahorita hay mucho tráfico, no voy allá”.

Los ciudadanos se desesperan. Incluso le exigen al taxista que haga la carrera. Y el hombre dice que no, a veces enojado. Además es su unidad, no es propiedad municipal, alegan ante el reclamo. Algunos en ocasiones explican que lo que ocurre es que son solo choferes y deben entregar el automóvil al dueño hasta cierta hora y no les queda tiempo. Pero otros admiten que no les gusta circular en zonas en donde hay mucho tráfico, prefiere dar vueltas en un mismo sitio y hacer carreras cortas.

En las cuentas de Twitter y hasta en Facebook se leen quejas en contra del servicio de taxis. Pasa uno y se niega a tomar la carrera. Se detiene el segundo y tampoco. El tercero, el cuarto, por fin el quinto acepta el viaje. Una operadora del Centro de Quito en una ocasión envió a una unidad y al llegar el chofer dijo que no subía hacia Yaku, que su carro no era más que motor 1 000 y que no quería que se estropeara. Y se fue.

Carlos Brunis, presidente de la Asociación de Taxistas de Pichincha, asegura que buscan que sus compañeros se enteren de que negarse a brindar el servicio es una contravención. El directivo además de conductor es abogado. Así que con el Código Orgánico Integral Penal sobre el escritorio busca el artículo 388, literal nueve.

Claramente se lee que el conductor de servicio público comercial, es decir de taxi, que se niegue a brindar el servicio, comete una contravención. ¿Qué podría ocurrir si un usuario denunciara al taxista ante una Agencia Metropolitano de Tránsito? El conductor podría recibir una multa del 40% del salario básico unificado de USD 354 y además perder 7,5 de los 30 puntos que tiene la licencia.

“Está vigente desde agosto. Por eso enviamos circulares para que los compañeros se informen”, dice el directivo. Su organización cuenta con 7 344 socios.

Un problema para los usuarios es que para que lo escrito en el Código Orgánico Integral Penal se cumpla es necesaria la presencia de una autoridad. Se necesitan pruebas. De lo contrario queda en la palabra del uno contra el otro. Lo mismo ocurre para que se cumpla la disposición de usar taxímetro las 24 horas del día. Hay que buscar a un agente metropolitano de tránsito para que sea testigo del hecho y se sancione.

También, las cooperativas de taxis tienen códigos internos. Hay algunas sanciones para quienes no tratan de forma amable al cliente, no usan el taxímetro, etc. Pero hay que animarse a denunciar. En ocasiones les quitan el derecho a utilizar la radiofrecuencia para la asignación de carreras por una o tres horas. También les multan. La Agencia Nacional de Tránsito recibe denuncias, hay un formulario para presentar la queja por no uso del taxímetro. Más datos en la av. Antonio José de Sucre y José Sánchez, también a través del 3828-890.

 

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