Manifestantes participan en una protesta en contra de abusos sexuales por parte de cuerpos policiales, el viernes 16 de agosto de 2019 en Ciudad de México (México). Foto: EFE
Unas 2 000 mujeres integrantes de organizaciones de defensa de los derechos de la mujer protestaron este viernes en Ciudad de México tras la denuncia de una denuncia de violación de una adolescente contra cuatro policías, movilización que concluyó en violentos actos vandálicos.
Bajo el lema “#NoMeCuidanMeViolan”, las manifestantes exigieron a las autoridades capitalinas mayor seguridad, luego de que una joven de 17 años, cuya identidad se mantiene en reserva, acusó a los oficiales de haber abusado de ella el 3 de agosto tras salir de una fiesta en el sector de Azcapotzalco, en el norte de la capital.
“Me preocupa que las jóvenes no puedan ir a la escuela o regresar de una fiesta tranquilas porque alguien las viola porque se puede, porque no pasa nada, y mucho más cuando son las autoridades que deberían estar resguardándonos”, dijo a AFP Melissa Ortiz, de 40 años, que asistió a la marcha.
Al grito de: “¡Exigir justicia no es provocación! ” y “¡Yo sí te creo!”, la protesta inició de forma pacífica en la céntrica Glorieta de la avenida Insurgentes, pero terminó con el incendio de una comisaría policial y una estación de transporte público, pintadas al monumento del Ángel de la Independencia y agresiones contra periodistas masculinos.
El lunes 12 de agosto, colectivos de defensa de los derechos de la mujer se manifestó por el mismo caso, protesta que culminó en la fiscalía local con incidentes al ser destruidas las puertas de vidrio del recinto.
Entre consignas, gritos de resistencia y tambores, las mujeres mexicanas levantaron su voz en contra de la violencia machista. Además, protestaron para batallar contra los abusos sexuales por parte de cuerpos policiales, este viernes en Ciudad de México (México). Foto: EFE
Y el jueves 15 de agosto, la fiscalía señaló discrepancias en la versión de la joven, al filtrarse imágenes de dos cámaras de seguridad de los vecinos del lugar donde habría ocurrido la presunta violación.
Según el testimonio de la menor, los policías la habrían visto en la calle. La chica dijo que sintió temor y tocó la puerta de una casa, que no era la suya, en busca de protección, y que luego fue llevada a la fuerza a la patrulla donde habrían abusado de ella.
La Fiscalía mexicana señaló que la menor no acudió a ratificar la denuncia ni a identificar a sus presuntos agresores.
Mariana Urías, de 18 años, señaló que la protesta no se trató de una “agresión o de una provocación a la violencia” , sino la intención de desahogar el hartazgo y preocupación por la violencia de género en México.
La violencia contra las mujeres, en forma de feminicidios, maltratos, acoso y abuso sexual, se ha recrudecido en México en los últimos años.
Según Naciones Unidas, a diario son asesinadas un promedio de nueve mujeres en México.