En el Complejo Deportivo Toalí, en el sureste de Manta, se concentró las donaciones de varias partes del país y se realizó la repartición a los damnificados del terremoto. El presidente Rafael Correa llegó hasta este lugar de acopio el martes 19 de abril del 2016. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO
El presidente Rafael Correa arribó hoy, miércoles 20 de abril de 2016, a Quito y desde Carondelet anunció que esta noche se dirigirá a la nación para notificar de las “medidas temporales” que tomará el Gobierno para afrontar los daños causados por el terremoto del sábado, de 7,8 en la escala de Richter.
Su retorno a la capital fue para coordinar el trabajo nacional y gobernar para todo el país. Recordó que la tragedia ocurrió cuando se encontraba en el Vaticano, en donde dictaba una conferencia a propósito de las encíclicas en las que trabaja que el papa Francisco. Estuvo el domingo 17, en las zonas afectadas, en recorridos, repitió que es importante “tener liderazgo en el territorio”. Pese a eso, dijo, que mantuvo reuniones a través de videoconferencia con el gabinete.
Mañana jueves volverá al territorio, esta vez recorrerá Esmeraldas, al sur, especialmente Muisne. Aunque comentó que a veces las visitas de los presidentes en las zonas de desastre no siempre son eficientes, señaló que animan a la gente.
El Mandatario también advirtió que la infraestructura pública nueva resistió “bastante bien” por la calidad de su construcción. Que el problema son en su mayoría las infraestructuras privadas y viejas, que eran de mala calidad, como hoteles y centros comerciales.
El presidente Correa agradeció a los medios de comunicación, comentando que en general han sido objetivo. También resaltó el trabajo de las alcaldías, como la de Quito y Guayaquil, para recoger y enviar donaciones. Y agradeció a la empresa privada, apuntó que los atuneros de Manda enviaron una colaboración importante, y dijo que no ha sido necesario requisar agua porque los embotelladores han colaborado y tienen garantizada la provisión y ya están avanzando en la distribución. Recordó que las UPC más modernas son puntos de distribución de agua y víveres.
ijo que los centros fijos de entrega están listos, pero algunos no están totalmente habilitados. Sin embargo, indicó que la gente puede acercarse a todas las Unidades de Policía Comunitaria que están preparados como puntos de distribución. Solo las UPC modernas, que tienen espacio.
Ahí las personas pueden conseguir agua potable para bañarse, lavarse los dientes, entre otras actividades de limpieza.
Se han enviado 100 vuelos con insumos, 13 000 toneladas de alimentos, tres barcos con agua potable. La ayuda de las empresas privadas es “increíble” dijo el Mandatario.
Además informó que hay 18 400 personas desplegadas en territorio, más de 1 073 rescatistas internacionales y 700 nacionales, 8 300 efectivos militares en la zona y los demás en actividades de coordinación, 4 521 policías, 4 000 médicos y enfermeras, 1 500 voluntarios.