El Prefecto de Imbabura pide al Gobierno derogar el estado de excepción

Vía Panamericana, en el tramo Ibarra-Otavalo. Personas avanzando a pie por el sector de San Roque. Fotos Álvaro Pineda/ParaELCOMERCIO

Vía Panamericana, en el tramo Ibarra-Otavalo. Personas avanzando a pie por el sector de San Roque. Fotos Álvaro Pineda/ParaELCOMERCIO

Una estación de servicio de Ibarra, indicando que solo hay diesel. La gasolina comienza a escasear. Foto: Washington Benalcázar/ELCOMERCIO

Las protestas continúan en varios sectores de la provincia de Imbabura, ubicada en el norte de Ecuador, este 6 de septiembre del 2019. Los manifestantes volvieron a colocar piedras y troncos y quemar llantas en varios tramos de la carretera Panamericana. La medida que inició en la madrugada continuaba hasta el cierre de esta edición, a las 16:00. 

Los puntos más críticos hasta el momento son los sectores vecinos a las comunidades indígenas de Peguche (cantón Otavalo), ingreso a Santa Ana de Cotacachi (Cotacachi) y San Roque y Natabuela (Antonio Antonio). También en San Antonio de Ibarra y los accesos norte y sur de la capital de Imbabura.

Vía Panamericana, en el tramo Ibarra-Otavalo. Personas avanzan a pie por el sector de San Roque. Foto: Álvaro Pineda/Para ELCOMERCIO

La medida de hecho afecto básicamente la circulación vehicular entre los cantones. A pesar de ellos, varios viajeros caminaban, llevando maletas, por la Panamericana. En la zona urbana también se bloquearon algunas arterias viales.

La Policía Nacional cercó la Gobernación de Imbabura. Para ello colocó vallas metálicas en las calles céntricas de Ibarra. Con ello se busca evitar nuevos ataques al inmueble estatal, como los del 3 de octubre pasado, cuando un grupo de manifestantes lanzó piedras y destruyó los cristales.

Árbol caído en el sector del partidero a Cotacachi. Foto: Álvaro Pineda/Para ELCOMERCIO

A las 15:00 llovió en la mayo parte de Imbabura. Eso ayuntó a los manifestantes y transeúntes. Sin embargo, varios grupos sociales se auto convocaban para continuar con las protestas en la tarde.

El sector comercial prácticamente suspendió sus actividades. No abrieron sus puertas las tiendas, almacenes y mercados. Tampoco las estaciones de servicio. Se informó que los productos básicos, como alimentos y combustibles, comenzaron a escasear.

El prefecto de Imbabura y presidente del Consorcio de Gobiernos Autónomos Provinciales del Ecuador, Pablo Jurado, mediante un comunicado, solicitó al régimen de Lenín Moreno derogar el estado de excepción y destinar los recursos que se gastan en salud, educación, vialidad, fomento productivo y conservación del patrimonio natural.

También sugirió que se organicen mesas de diálogo para superar las diferencias entre el Gobierno y los sectores sociales y gremios.

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