Las fábricas aledañas al incendio producido el día lunes 16 de septiembre del 2019 suspendieron sus labores para precautelarse de los gases tóxicos que pudo producir el humo. Foto: Eduardo Terán
Aún continúa un fuerte olor a plástico quemado en el centro de acopio y reciclaje que se incendió la tarde de ayer lunes a las 17:58. Latas vueltas cenizas y estructuras metálicas fueron teñidas de negro.
Este incendio se produjo en las calles el Juncal y De los Eucaliptos, en el sector La Cristianía, en el norte de Quito. Al lugar llegaron 50 miembros del Cuerpo Bomberos de Quito (CBQ) con 15 vehículos contra incendios para aplacar las llamas que conmocionaron a moradores y a la ciudadanía. Se podía observar de distintos puntos cómo el fuego se elevaba. A las 21: 26 los bomberos lograron apagar las llamas.
Los productos de reciclaje quemados generaron una gran concentración de humo y llamas en la zona. Aún se puede observar el plástico quemado que luce apilado. Las llamas no alcanzaron otro galpón donde hay palets de madera apilados y ninguna fábrica o casa aledaña sufrió una afectación.
Los casacas rojas permanecen en el sitio, este martes 17 de septiembre del 2019, para controlar que los ‘puntos calientes’ estén sofocados por completo.
El subteniente de Bomberos, Pablo Vega, indicó que tres unidades fueron dispuestas para permanecer en el lugar. Una unidad de materiales peligrosos realiza “mediciones y monitoreo de gases nocivos que puedan afectar a las personas que están aledañas a esta fábrica”. Se determinará si representa riesgo para la salud y se hará las indicaciones pertinentes.
Miembros del Cuerpo de Bomberos Quito acudió al lugar del incendio con 50 efectivos y 15 vehículos contra incendios. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Fernanda Yépez Calderón, subsecretaria de Educación del Distrito Metropolitano de Quito, asistió al Colegio Quito Luz de América donde las clases fueron suspendidas para precautelar la seguridad de los estudiantes y del personal educativo.
“Para garantizar la seguridad se tomó la decisión de suspender las clases para que los 82 estudiantes estén seguros”, dijo Yépez.
Al momento, la Unidad de Investigación del CBQ se mantiene en el sitio para determinar las causas que originaron el siniestro, así como las responsabilidades de ser el caso.
No se reportaron víctimas que lamentar. Por precaución se decidió impedir que fábricas aledañas laboren para garantizar que no haya ningún percance.
El CBQ recomendó a moradores y trabajadores del lugar que se mantengan cerradas las ventanas en los domicilios y lugares de trabajo. Esto por los gases que se continúan emanando aunque, de forma preliminar, se indicó que no representan un riesgo para las personas.