Pie de foto: De izquierda a derecha: Antonella Calle, de Yasunidos, Josué Berrú, de la Red Ecuatoriana de Fe, Virginia Gómez de la Torre, Fundación Desafío, Paola Moreira, Sororas Manta, Maidy Zabala, Aequitas, Mayra Chalán, Ecuarrunari, en rueda de prensa sobre la despenalización del aborto por violación y otras causales. Valeria Heredia / EL COMERCIO
“Unas siete niñas dan a luz y otras siete abortan a diario, en el país”. Así lo explicó Virginia Gómez de la Torre, presidenta de la Fundación Desafío, en el marco de la rueda de prensa de organizaciones sociales que exhortaron a la Asamblea a aprobar la despenalización del aborto por violación, incesto y otras causales –constan en las reformas al Código Orgánico Integral Penal (COIP).
La despenalización del aborto por violación, incensto y por malformación del feto fue incorporada en el informe para primer debate del proyecto de reformas al COIP. El documento se incluyó el miércoles 19 de diciembre del 2018.
Gómez señaló que en Ecuador aún se permite que las niñas den a luz de sus violadores, por lo que habló de la importancia de la despenalización del aborto por las causales detalladas anteriormente. “Apoyamos a quienes se han posicionado a favor en la Asamblea”.
La activista por los derechos de las mujeres, además, detalló que en el país se han registrado 13 000 embarazos de niñas entre los 9 y 14 años, desde el 2013 hasta la fecha. Según el COIP vigente se considera violación toda relación sexual con niños y adolescentes menores de 14.
Hay más datos sobre criminalización del aborto: dos mujeres están privadas de la libertad por este motivo y otras 307 están siendo investigadas por la Fiscalía, sostuvo Gómez.
En la rueda de prensa, que se efectuó la mañana de este miércoles 7 de agosto del 2019, participaron representantes de organizaciones sociales. Maidy Zabala es activista por los derechos de las mujeres e integrante de Aequitas Cuenca. Para ella, es un momento histórico que se vive en el país, ya que se escucha los derechos sexuales y reproductivos en la región.
Zabala, también, insistió que Ecuador tiene obligaciones a escala internacional y que debe cumplir con los exhortos de comités internacionales que dijeron que en el país debe despenalizarse el aborto al menos por violación. “Cinco comités le han dicho a Ecuador que despenalice el aborto en casos de violación. Si no se lo cae en un crimen de tortura a mujeres víctimas”.
En esto coincidió Mayra Chalán, representante de Ecuarrunari. Ella insistió que los asambleístas tienen en sus manos una decisión importante y que deben tomar las mejores consideraciones para dar paso a este tema.
“Es una realidad que las violaciones suceden. Las mujeres mestizas, indígenas y negras abortamos en clandestinidad, sin acompañamiento médico. Abortamos porque no podemos tener más hijos, porque tenemos problemas de salud o porque decidimos abortar. En este momento 11 mujeres están siendo violadas”, sostuvo.
Un pedido similar hicieron Antonella Calle, del colectivo Yasunidos, y Josué Berrú, de la Red Ecuatoriana de Fe. Ambos reconocieron que se ha hecho un trabajo sostenido y que el Estado no debe obligar a parir a las mujeres producto de violaciones o incesto.
“El incesto es alto en la provincia de Manabí”, explica Paola Moreira. Ella es de la agrupación Sororas Manta, que son parte del grupo Tejedora Manabita. “Me duele y avergüenza decir que Manabí es una provincia de incesto. Se naturaliza a que las mujeres sean madres”.