Funcionarios de la Agencia Metropolitana de Control realizaron varios operativos en el norte, centro y sur de Quito. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
Una serie de operativos de control del espacio público se desplegaron desde la mañana hasta la tarde de este martes 7 de abril del 2020 en diferentes sitios del sur, centro y norte de Quito. En todo Ecuador se aplica una restricción de movilidad y medidas de distanciamiento social por la pandemia del covid-19.
Brigadas de militares, policías, agentes metropolitanos, agentes de tránsito y funcionarios de la Agencia Metropolitana de Control (AMC) se ubicaron en varios sectores de la capital para pedir a la ciudadanía que no salga de sus viviendas y también controlar las ventas informales en la vía pública.
Los equipos primero recorrieron el barrio La Magdalena, en el sur. Ahí los policías metropolitanos retiraron las canastas con productos de primera necesidad que expendían los comerciantes informales. Forcejearon con los mercaderes hasta quitarles los productos y embarcarlos en un camión de la Policía Metropolitana y en camionetas.
En La Magdalena la AMC también clausuró un local de Internet y servicio de copias que no tenía autorización para atender al público. “Lamentable tenemos que clausurar un local pero en este momento la salud y seguridad de la población es más importante y no podemos permitir mayores contagios”, explicó la supervisora general de la AMC, Estefanía Grunauer. Según la declaratoria de emergencia, ningún local que no sea de víveres o productos de primera necesidad puede abrir, “no importa la excusa, estos locales deben permanecer cerrados”, dijo Grunauer.
Luego las brigadas de control recorrieron la avenida Rodrigo de Chávez hasta llegar al sector de El Camal, en Chiriyacu (sur). En el trayecto, decenas de transeúntes observaban cómo los uniformados tomaban las canastas con alimentos que los informales vendían en la vía pública y se las llevaban en los vehículos del Municipio. La mayoría de personas utilizaba mascarillas y guantes de látex; pocos caminaban sin protección.
Al llegar a la avenida Maldonado y El Corazón los agentes se llevaron las frutas de una comerciante. Ella forcejeó con ellos y se quejaba llorando de que no tiene otras formas de trabajar para mantener a su familia. Diez minutos después los agentes de control llegaron al sector del Mercado de Chiriyacu en donde, minutos después, se registraron enfrentamientos con los comerciantes.
Un grupo de vendedores insultó y atacó a los uniformados; les lanzaron piedras y palos. Por momentos se produjo una lluvia de frutas y hortalizas. El parabrisas de una de las camionetas del Municipio resultó afectado. También provocaron daños en las carrocerías de los vehículos. En medio de los forcejeos, los agentes retiraron manzanas, aguacates, plátano verde, entre otros productos. No hubo heridos, tampoco se apresó a los agresores.
En los operativos participaron 80 efectivos. Las autoridades indicaron que ya se realizaron varias socializaciones y ahora los controles serán más rigurosos.
César Díaz, secretario de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio, indicó a este Diario que los operativos serán permanentes para recuperar el espacio público y evitar la propagación del covid-19. En ese sentido, hoy se realizó un recorrido en el sur, principalmente en los sectores de Solanda, La Gatazo, El Pintado, La Magdalena, Villa Flora, Chiriyacu y San Bartolo.
“Cada vez encontramos menos gente apostada realizando actividades de comercio. Ahora actuamos con mano firme y retiramos productos de primera necesidad de quienes no hacen conciencia y piensan que el virus no puede hacerles daño”, indicó.
Con relación a los enfrentamientos de hoy en Chiriyacu, el funcionario lamentó que quienes se tomaron el espacio público reaccionan de forma agresiva. Rechazó que hayan recibido a los agentes civiles con piedras y armas blancas. “No nos oponemos al derecho al trabajo, pero debemos hacer respetar las medidas preventivas”.
En la mañana se desplegaron dos operativos móviles en los barrios mencionados. Uno se realizó en la mañana y otro al mediodía. “Las intervenciones serán permanentes en el Distrito Metropolitano (…) El mal uso del espacio público genera aglomeraciones, por eso continuaremos con las intervenciones”.
En el Comité del Pueblo, en el norte, también hubo intervenciones coordinadas. Policías, militares y agentes metropolitanos recorrieron las calles y avenidas para verificar documentos en los locales comerciales y pedir a las personas que se queden en sus viviendas. También se controló las ventas informales. En ese sector se reportó un alto flujo de personas que caminaban en las aceras e ingresaban a los locales comerciales.