La limitación en la circulación se cumplió a medias en Ecuador

Los agentes municipales de Ambato obligaron a los comerciantes a cerrar los negocios de zapatos y ropa. Foto: Modesto Moreta / EL COMERCIO

Los agentes municipales de Ambato obligaron a los comerciantes a cerrar los negocios de zapatos y ropa. Foto: Modesto Moreta / EL COMERCIO

Los agentes municipales de Ambato obligaron a los comerciantes a cerrar los negocios de zapatos y ropa. Foto: Modesto Moreta / EL COMERCIO

Los habitantes de Ambato, Ibarra, Cuenca, Riobamba, Santo Domingo y Esmeraldas se movilizaron ayer, 17 de marzo del 2020, a los centros de abastos para comprar alimentos. Y la circulación vehicular, particular y el transporte público, se hizo a medias.

Los alcaldes y autoridades anunciaron que desde hoy, 18 de marzo, habrá una restricción total de la transportación interprovincial. Tampoco, habrá el servicio público en las ciudades.

En Ambato, el alcalde Javier Altamirano restringió la circulación del transporte público intracantonal, parroquial y urbano. Se incluyeron a los taxis, de carga liviana y la institucional.

Además, prohibió el uso total del espacio público como avenidas, puentes, pasajes, plazas y plazoletas, parques, casas comunales, canchas, escenarios deportivos.

El movimiento comercial y peatonal en el centro de Ambato disminuyó pasado el mediodía de ayer. Tras varias denuncias en las redes sociales por la falta de control, al menos 250 agentes municipales y de la Policía obligaron a los propietarios de 50 locales a cerrar sus puertas.

En Cuenca, el flujo de vehículos y personas en las calles de la capital azuaya disminuyó considerablemente. La terminal terrestre trabajó a medias y con controles para que los buses salieran con los pasajeros sentados.

El transporte urbano, interparroquial e intercantonal laboró en un 50%, pero para hoy se cerrará la terminal y el transporte público.

En Ibarra, las avenidas tuvieron poca circulación vehicular y la mayoría de las dependencias públicas y privadas estuvo cerrada. Los ibarreños se quedaron en la casa y pocos acudieron a los centros de abasto de alimentos crudos, como el mercado Amazonas, el principal de la urbe, que abrió sus puertas.

En Riobamba, los mercados y sitios de abasto de productos de primera necesidad, como el Camal Municipal de Riobamba, tuvieron concurrencia. En la ciudad no hubo transporte público.

En Santo Domingo, las calles del centro de la urbe amanecieron cerradas y controladas por agentes municipales. Las dos cooperativas de buses urbanos suspendieron la circulación de pasajeros.

En Esmeraldas, las actividades fueron parciales. La playa de Las Palmas estuvo vacía.

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