Julian Assange saluda a simpatizantes, antes de ser trasladado a la Corte de Westminster. Foto: EFE
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, permaneció su primera noche en prisión luego de ser detenido en la Embajada ecuatoriana en Londres.
Assange estaría, según la prensa británica pues no ha sido revelada oficialmente su destino, en la prisión pública de Wandsworht, que está destinado para aquellos que presentan “riesgo de evasión”. En Wandsworth hay aproximadamente 1 600 reclusos, según un informe del 2018.
Assange fue detenido, según Scotland Yard y que luego confirmó la primera ministra británica Theresa May, por el pedido de extradición de Estados Unidos. Sin embargo, fue condenado por el juez británico Michael Snow por haber violado la sentencia de libertad condicional y no acudió a la citación judicial de hace siete años.
La sentencia se dictará en los próximos días. Las fuentes coinciden en que la pena será de un año. Por el momento, deberá cumplir esa pena antes de ser extraditado, según medios británicos.
El juez Snow le preguntó a Assange en la audiencia: “¿Acepta usted la demanda de extradición?”.
“No”, respondió Assange.
El 2 de mayo deberá presentarse a una audiencia judicial en la que se examinará el pedido estadounidense.
El líder laborista, Jeremy Corbyn, exhortó al Gobierno a oponerse a la extradición.
De ser extraditado, Assange enfrentará un proceso por conspiración para ‘hackear” una computadora del Estado. Le podría valer cinco años de prisión.
Está acusado de haber ayudado a la exanalista de inteligencia estadounidense Chelsea Manning a obtener la contraseña para acceder a miles de documentos clasificados como ultrasecretos. La plataforma WikiLeaks de Assange difundió cientos de miles de documentos secretos del ejército y la diplomacia de Estados Unidos, en el 2010.
No hay otro proceso en contra de Assange. El debate gira en torno a si es posible que se produzcan acusaciones suplementarias.
Una posibilidad es el informe sobre la colusión entre el actual presidente, Donald Trump, y la inteligencia rusa para filtrar los correos electrónicos de la candidata demócrata Hillary Clinton, en 2016. La tarea de Wikileaks fue fundamental para que se favoreciera el magnate estadounidense. Sin embargo, ese informe, que llevó a cabo el fiscal especial Robert Mueller, aún no se conoce.