Imágenes de los daños que dejan derrumbes en la vía Cuenca-Loja; paso está cerrado y hay viviendas afectadas

El caudal formó una gran laguna que se desbordó hacia la carretera. Foto: Cortesía Juan Villamagua

El caudal formó una gran laguna que se desbordó hacia la carretera. Foto: Cortesía Juan Villamagua

Así quedó el barrio Paquisha en la entrada a la cabecera parroquial de Santiago, tras los derrumbes registrados en la vía Cuenca- Loja. Foto: Cortesía Juan Villamagua

Tras un fuerte aguacero registrado la tarde del miércoles 2 de diciembre del 2020 en las parroquias lojanas de San Lucas y Santiago, la vía Cuenca-Loja, la mañana del jueves seguía bloqueado al paso vehicular en esa vía del sur del Ecuador. El fenómeno dejó una familia evacuada, más de 20 viviendas afectadas y pastizales anegados.

Willman Morocho, habitantes de Santiago, parroquia ubicada a 30 minutos de Loja, contó que fueron 45 minutos de intenso aguacero.

El clima ocasionó que la quebrada de Guillín, ubicada en la parte alta se desbordada y formara una inmensa laguna. El agua se desfogó hacia la carretera en pendiente.

Las imágenes publicadas en las redes sociales muestran cómo el líquido descendía como otro río y la fuerza de la corriente arrastraba hasta vehículos pesados, como buses y camiones, que avanzaban o estaban estacionados. Los habitantes vivieron momentos de tensión.

Unos 300 metros abajo el agua ingresó a un colegio y colapsó la quebrada de Santiago anegando a casi todo el barrio de Paquisha, en la entrada a la cabecera parroquial. Allí una vivienda colapsó parcialmente y la familia fue evacuada por seguridad.

En otras 20 casas, el lodo ingresó causando daños y pérdidas materiales, explicó Mery Montoya, presidenta de la Junta Parroquial. Algunas familias lograron sacar algunos enseres. También hay alcantarillas colapsadas, y pastizales y cultivos afectados.

Dos horas después, cuando el agua terminó de descender, la avenida Panamericana y las calles quedaron con grandes capas de lodo, palizadas y demás escombros. Los habitantes viven de la agricultura y la ganadería, y temen que con las nuevas lluvias se repita esta emergencia.

Desde el la tarde del miércoles, maquinaria de la Junta Parroquial y del Ministerio de Transporte y Obras Públicas trabajan en el sitio, en la remoción de los escombros. La mañana de este jueves se sumaron vehículos del Municipio de Loja y de la Prefectura.

Montoya calcula que con toda esa maquinaria trabajando, la vía estaría habilitada en unas tres horas. No obstante, también hay múltiples derrumbes en la vecina parroquia de San Lucas, por el desbordamiento de quebradas y el colapso de alcantarillas.

En los sitios afectados hay maquinaria trabajando. Hasta las 11:00 del jueves, los vehículos pequeños hacían trasbordos y los grandes (buses interprovinciales) utilizaban la antigua Panamericana que está en condiciones transitables.

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