Dos meses han pasado desde que Emiliana, una niña de un año, falleció de forma repentina al cuidado de su madre y su padrastro, en Guayaquil.
Para el padre biológico de la menor, la muerte de la pequeña no está clara. Por eso, la mañana de este miércoles, 9 de diciembre de 2020, llegó junto a otros familiares hasta los exteriores de la Fiscalía Provincial del Guayas para pedir que se indague la muerte.
Con pancartas rosas y con fotografías de la pequeña realizaron un plantón para exigir que el cadáver sea exhumado y se realicen nuevos análisis.
Los parientes sospechan que Emiliana fue agredida físicamente antes de fallecer. Según los familiares, la pequeña presentaba moretones en su cuerpo. Por eso, en las pancartas colocaron frases como: “Derecho a la vida. No al maltrato infantil” y “La vida de un niño es la pureza de Dios”. Además, gritaron repetidamente la frase “Justicia para Emiliana”.
Una tía de la menor también indicó que piden a la Fiscalía que tomen la versión del pediatra de la bebé. El especialista la habría chequeado un poco antes de morir y habría señalado que estaba deshidratada y debía ser internada.
Inicialmente, la Policía informó que la muerte de la pequeña se dio producto de una insuficiencia respiratoria y asfixia por broncoaspiración. Es decir, la pequeña falleció ahogada porque tuvo un reflujo gástrico y alimentos ingresaron a su vía respiratoria.
Pero el padre de la menor dice que la Policía también confirmó que la pequeña tenía golpes en su cabeza, rostro y cuerpo.