La especialista señaló que pese a las mutaciones las vacunas mantienen su seguridad y eficacia. Foto: EFE.
La nueva variante de coronavirus, identificada en Reino Unido, generó preocupación en la comunidad científica y en la población. Uno de los motivos es la posibilidad de que las vacunas que se desarrollan no funcionen para combatir al SARS-CoV-2, causante de la enfermedad covid-19.
El virus ha dejado 81,1 millones de contagiados; solo Ecuador alcanzó 209 758 infectados, hasta este lunes 28 de diciembre del 2020.
EL COMERCIO conversó con Jhommara Bautista, ingeniera en Biotecnología e investigadora de la Fundación Ecuatoriana del Cáñamo Industrial para el Desarrollo Sostenible (Fecids), la mañana de este lunes. Ella precisó que pese a las mutaciones las vacunas mantienen su seguridad y eficacia.
La farmacéutica estadounidense Pfizer y su socio alemán BioNtech -señala- ha publicado recientemente el código genético de la dosis. Es decir, el número variantes que serían susceptibles a la fórmula desarrollada.
¿Por qué las vacunas contra el covid-19 que se elaboran en el mundo son seguras pese a las mutaciones del virus?
Hay muchas variantes del SARS-CoV-2 y la identificada en Reino Unido es hasta un 70 % más transmisible de lo que hemos visto. Eso se debe a las mutaciones que presenta en el código genético. En total son 23 identificadas.
Cuando crearon la vacuna de Pfizer y BioNtech se cambiaron los aminoácidos (aquellos que están codificados en el genoma). Estos hacen que sea más estable y eficaz.
Por ello, la dosis sigue siendo segura, debido a que genera anticuerpos. Además, no se ha comprobado que la nueva variante sea más letal; sigue bajo estudio.
¿En qué momento dejaría de ser efectiva la vacuna? ¿Solo si cambia la cepa?
Exacto, solo si existiera una nueva cepa. No es lo mismo una variante. Estas últimas son parte natural de los virus, su naturaleza es mutar a medida que se replica o reproduce.
¿Qué tan complejo es el uso del ARNm?
La manipulación del ARN es muy delicada. Se degrada fácilmente si no se manipula de forma correcta. También si no se conserva a la temperatura adecuada.
¿El desarrollo de este tipo de vacunas ya tenía algún tiempo? ¿Quién comenzó con los estudios?
Sí, vienen haciéndolas desde 30 años. Katalin Karikó, una científica de Hungría, fue la primera en estudiar el ARN mensajero o ARNm para tratar enfermedades y o elaborar estas fórmulas para inmunizar.
¿De qué otras investigaciones participó la experta húgara?
Karikó estuvo al frente de importantes avances. En el 2005 resolvió un fallo del ARNm sintético. Después de varios años, ella y un colaborador descubrieron cómo enviarlo a la parte correcta de las células. Este hallazgo fue clave para la fabricación de la vacuna que hoy tenemos para la covid-19 desarrollada por Pfizer y BioNtech. Ahora Karikó es vicepresidenta de este laboratorio alemán.
¿Entonces se mantiene el llamado a la vacunación de la población pese a las mutaciones del virus?
Sí, no hay porque alarmarse. Hay que promover la vacunación. De hecho, para asegurar que las reacciones de anafilaxia (efectos alérgicos propios de las dosis) sean leves, se han hecho más pruebas dentro del ensayo. Por ello son seguras para personas de 18 años en adelante. En niños aún no se realizan pruebas, pero pronto lo harán.