Los militares y la Policía realizan patrullajes en la población fronteriza de Mataje. Foto: FF.AA.
Los escondites de alias ‘Guacho’ quedaron al descubierto. Un antiguo lanchero que colaboraba con las FARC entregó información detallada sobre las operaciones delictivas, los miembros, el tipo de armamento y los sitios por donde se movía el líder del grupo narcodelictivo Óliver Sinisterra.
Estos datos constan en una versión que emitió ante la Policía de Colombia, en abril pasado, y que fue remitida en junio a la Fiscalía ecuatoriana.
El hombre, detenido en ese país, señala que la escolta de seguridad de ‘Guacho’ está compuesta por 15 hombres.
Todos portan armas cortas y fusiles de asalto Galil, de origen israelí, que actualmente usa el Ejército colombiano. También poseen fusiles largos como el modelo Fal, que portan los soldados ecuatorianos y peruanos. Otros modelos que usan son ametralladoras M60, de origen estadounidense y empleadas por las fuerzas armadas de Colombia.
¿Cuál es el origen de las armas? “En cuanto a la logística, las armas las compran a la Policía de Ecuador, que es la intermediaria de comprar el armamento en Perú”.
El testigo dice que las armas se entregan en Puerto Rico, un poblado colombiano, y en El Pan, en el lado ecuatoriano. “Desconozco la ruta del tráfico de las armas del Perú y Ecuador, pero la transacción financiera la realiza ‘Guacho’ y alias ‘Cachi’”, agrega. Este último era el segundo al mando del grupo armado. Fue detenido el 14 de marzo pasado, en Pereira (centro-oeste de Colombia).
Ayer, 9 de julio de 2018, EL COMERCIO buscó la versión de la Policía. Al cierre de esta edición se informó que se prepara un comunicado.
En otra parte del relato, el sospechoso cuenta que la estructura criminal tiene unos 300 hombres armados.
Ellos se distribuyen en poblaciones que se ubican en la frontera entre Colombia y Ecuador como Chontal, Candelillas, La Vuelta, Puerto Rico, La Balsa, Mata Plátano, Mongui, Vallenato, El Playón, El Coco y Montañita (Tumaco). Del lado ecuatoriano ocupan territorios en Mataje y Brisas del Mataje, en San Lorenzo.
El detenido agrega que ‘Guacho’ tiene una “casa de guerrilla”, ubicada dentro de una finca llamada Chocolate, que está cerca del caserío Las Delicias, en la parroquia de Mataje.
El detenido cree que en ese lugar se grabó el video en donde se evidencian las condiciones del cautiverio del equipo periodístico de este Diario, que fue secuestrado y asesinado por orden de ‘Guacho’.
Además, ese era uno de los escondites del cabecilla. Otra guarida está en la zona de El Guabal, en Tumaco. Allí también se instalaron los laboratorios para el procesamiento de cocaína, dijo.
Hasta el momento, ni la Policía ni la Fiscalía ecuatoriana han comprobado la veracidad de los datos proporcionados por el excolaborador.
Pero investigadores informaron ayer que ya se abrieron investigaciones reservadas.
Sobre el equipamiento, el detenido indica que los milicianos usan radios portátiles e incluso entregó al Gaula los números de las frecuencias que usan. Las minas las colocan “de acuerdo a Inteligencia delictiva. Es decir, donde se tiene conocimiento que hay tropa cercana”. Principalmente usan bombas cuando detectan a soldados realizando las labores de erradicación de los cultivos ilícitos de coca.
Para accionar los explosivos, el exmiliciano explica que hay dos formas. La primera se hace a través de “sistemas de telemando”. Significa que colocan los químicos dentro de cilindros y allí un teléfono celular. El momento que el celular timbra se produce la energía necesaria para el estallido. Este uso se restringe a las zonas donde hay señal de celular. En los lugares sin recepción, los disidentes se valen de cable blanco, que se lo extiende a más de 180 metros desde donde está la carga explosiva.
En una zona colombiana llamada Azúcar se realizan los entrenamientos. De hecho, el detenido dice que los armados reciben un curso donde les enseñan maniobras de ataque y manejo de armas.
Todas estas operaciones son financiadas por narcotraficantes de México, Panamá y otros que están en las localidades colombianas de Guayacana y Llorente, en Tumaco.
En contexto
El viernes se cierra la instrucción fiscal en la investigación por el ataque al comando de la Policía de San Lorenzo. En este caso hay 28 personas procesadas, incluido ‘Guacho’. Una de las evidencias es justamente la versión del lanchero en Colombia.