Hoda Muthana, de 24 años, nació en Estados Unidos de padres yemenitas que se naturalizaron estadounidenses antes del nacimiento de sus tres hijos. Foto: AFP
Estados Unidos dijo el miércoles 20 de febrero de 2019 que negará el ingreso de la yihadista estadounidense Hoda Muthana, quien viajó a Siria como partidaria del grupo Estado Islámico (EI) pero ahora quiere regresar a su país.
“La señora Hoda Muthana no es ciudadana de Estados Unidos y no será admitida en Estados Unidos”, dijo el secretario de Estado, Mike Pompeo, en un breve comunicado. “Ella no tiene ningún fundamento legal, ningún pasaporte válido de Estados Unidos, ni derecho a un pasaporte ni visa para viajar a Estados Unidos”.
“Seguimos recomendando a todos los ciudadanos de Estados Unidos que no viajen a Siria”, concluyó Pompeo. Esta declaración sobre Muthana, uno de los pocos estadounidenses entre los cientos de europeos que se unieron a las filas del EI en Siria, se contradice con los llamamientos del propio Pompeo a otros países para que hagan retornar y procesen a sus nacionales yihadistas.
Muthana, de 24 años, nació en Estados Unidos de padres yemenitas que se naturalizaron estadounidenses antes del nacimiento de sus tres hijos, según la ONG Counter Extremism Project. Su abogado, Hassan Shibly, dijo al diario USA Today que Hoda nació en 1994 en Nueva Jersey y se crió en Alabama.
A finales de 2014, poco después de mudarse a Siria, Muthana publicó en Twitter una foto de cuatro mujeres que parecían quemar sus pasaportes occidentales, incluido uno estadounidense.
Bajo el nombre de Umm Jihad, Muthana participó activamente en la propaganda yihadista, llamando incluso a “derramar sangre estadounidense” y glorificando al grupo EI, que llegó a dominar vastas zonas de Siria e Irak.
Pero en una entrevista publicada el domingo con el diario británico The Guardian, Muthana dijo que había renunciado al extremismo y quería regresar a casa.
La joven, que fue detenida por fuerzas kurdas aliadas de Estados Unidos, dijo que le habían lavado el cerebro y que estaba avergonzada de haber apoyado al EI.
Muthana se casó tres veces con hombres yihadistas, todos fallecidos actualmente, y tiene un hijo pequeño.