En las imágenes enviadas por el ecuatoriano, realizadas desde su vivienda en un edificio alto de Wuhan, se observa que las calles están desoladas. Foto: Captura
Tras las alertas mundiales sobre la circulación de una nueva cepa de coronavirus, ecuatorianos residentes en China han tenido que adaptarse a las medidas de seguridad que rigen en las diferentes localidades del país asiático.
En China se encuentran registrados 1 194 ecuatorianos, en 11 ciudades. En Wuhan, lugar en donde se produjo el brote epidémico del coronavirus, viven nueve compatriotas que se encuentran fuera de peligro, hasta este jueves 30 de enero del 2020.
Uno de ellos es Marcelo Toalombo, oriundo de Ambato. Él estudia en una universidad en Wuhan. El compatriota llegó en septiembre del 2017 a esa localidad, con el objetivo de seguir un PhD en tecnologías de comunicación y de información, por medio de una beca.
“Permanecemos aislados y la disposición es no salir de las casas. Debemos tener cerca una mascarilla -en caso de salir-. Se lo hace para comprar alimentos o medicamentos”.
Cuando ha salido evita las aglomeraciones, va a puntos específicos para la compra de víveres y productos para el aseo.
El profesional ecuatoriano contó que se han organizado grupos de comunicación, por medio de chats, para conocer la situación de otros compatriotas. “Nos mantenemos informados y sabemos que todos estamos bien de salud”.
Afortunadamente, dijo, los servicios básicos en Wuhan están funcionado con normalidad, es decir, disponen de agua, luz e Internet. Pero está suspendido el sistema de transporte.
En las imágenes enviadas por el ecuatoriano, realizadas desde su vivienda en un edificio alto de Wuhan, se observa que las calles están desoladas. No hay tránsito vehicular ni personas caminando en las vías.
Este jueves 30 de enero del 2020, la Organización Mundial de la Salud declaró la emergencia internacional ante el nuevo coronavirus, brote que se originó en China. Hay 170 fallecidos. Hay 7 700 contagiados.