Dilma Rousseff presenta su defensa frente al Senado de Brasil, este 29 de agosto del 2016, durante el juicio político que busca destituirla de la Presidencia de Brasil. Foto: EFE
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, reiteró hoy 29 de agosto del 2016 su decisión de convocar elecciones anticipadas en caso de que el Senado no la destituya en las próximas horas de su cargo.
“Llego a la última etapa de este proceso comprometida con la realización de una demanda de la mayoría de brasileños: convocarlos a decidir, en las urnas, sobre el futuro del país“, dijo Rousseff en su discurso de defensa ante el Senado.
La Cámara alta debe decidir este martes o miércoles sobre la destitución definitiva de Rousseff, suspendida de su cargo desde mayo por acusaciones de haber manipulado los presupuestos públicos.
Los opositores de Rousseff necesitan una mayoría de dos tercios entre los 81 senadores para destituir a la mandataria.
La caída de Rousseff tras cinco años y medio de Gobierno es considerada como altamente probable. El propio Senado suspendió a la presidenta en mayo con una amplia mayoría.
El controvertido juicio político contra Rousseff está enmarcado en varios escándalos de corrupción que salpican prácticamente a toda la clase política brasileña y en una dura crisis económica en la primera economía de América Latina.
El ‘impeachment’, como se conoce al proceso en Brasil, quedó encauzado en marzo después de que el principal socio de Gobierno de Rousseff, el centroderechista Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), abandonase a la presidenta.
El líder del PMDB, el vicepresidente Michel Temer, es el presidente interino desde mayo y asumiría definitivamente el cargo en caso de que Rousseff sea destituida.
La política de 68 años del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) reiteró hoy sus acusaciones de que el proceso es un “golpe de Estado” en su contra fraguado por intereses “ultraconservadores”.