Dhruv nunca recibieron los sistemas que mejoraban su seguridad en el aire

El 27 de octubre del 2009 ocurrió el primer accidente de los helicópteros Dhruv. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

El 27 de octubre del 2009 ocurrió el primer accidente de los helicópteros Dhruv. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

El 27 de octubre del 2009 ocurrió el primer accidente de los helicópteros Dhruv. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

Los Dhruv están oficialmente en desuso. Ayer, 14 de octubre del 2015, el Ministerio de Defensa suspendió las operaciones de los tres helicópteros indios que todavía quedaban de una flota de siete compradas hace apenas siete años.

Además, las juntas investigadoras confirmaron que los dos últimos accidentes ocurrieron por fallas mecánicas. En el helicóptero 603 se detectaron errores en el funcionamiento del piloto automático y en el 605 falló una zona del eje que transmite la potencia al rotor.

De hecho, en un video publicado en enero, horas después de la caída del 605, ya se advertía un posible defecto de la máquina. En las imágenes se observa que el aparato despega levemente y cinco segundos después se desploma entre los matorrales, cerca de la pista de la base de la FAE, en el Tena.

Pese a esto, el ministro de Defensa, Fernando Cordero, dijo ayer que la adquisición de los Dhruv se hizo “de buena fe” y se “escogió la mejor oferta”.

Esas declaraciones coinciden con lo que ya sostuvo el presidente Rafael Correa en febrero. “¿A quién se le va a ocurrir que se va comprar helicópteros con defectos?”.

Sin embargo, en octubre del 2007, el entonces comandante de la FAE, Jorge Gabela, cuestionó la calidad de las naves indias e incluso revocó la primera adjudicación que se hizo a la empresa HAL, fabricante de los Dhruv por “posibles problemas en cuanto a la entrega de los helicópteros”. Eso se dice en documentos desclasificados a los que accedió este Diario.

El General (asesinado en el 2010) dejó la FAE en abril del 2008, y el nuevo Mando Militar, en un segundo proceso, adjudicó otra vez a HAL el contrato por USD 45,2 millones.

Ocho años después del pronunciamiento de Gabela, la Contraloría General del Estado ratificó que hubo retrasos en la entrega de equipos. Este dato consta en un informe hecho público la semana pasada. En el documento se asegura que HAL no entregó “varios sistemas” tecnológicos con los que debían operar los Dhruv.

Los auditores también concluyeron que la “no instalación” de esas herramientas “ocasionó un perjuicio a la FAE de USD 2,4 millones”.

Entre los sistemas que nunca envió la empresa india están equipos para configurar sistema de alerta de tráfico y evasión de colisiones, de integración de los sistemas de navegación a las pantallas de los helicópteros, sistema de búsqueda automática, según lo reconoció ayer Cordero.

El alto funcionario no precisó si esas piezas faltantes incidieron en los accidentes reportados en las naves 603 y 605.

Pero documentos en poder de EL COMERCIO revelan que, con esos sistemas, los helicópteros podían, por ejemplo, mejorar los niveles de seguridad aérea, reducir las probabilidades de una colisión entre aeronaves en vuelo, proteger a los aparatos que vuelan a bajo nivel o contra cables (de luz) y mejorar la respuesta de los pilotos a situaciones extremas.

Ahora, siete años después de la compra de los siete Dhruv y tras cuatro accidentes, Defensa anunció el fin unilateral del contrato con la empresa HAL.

En enero, Cordero comentó que si los investigadores comprueban que hubo daños mecánicos en el 603 y 605 plantearán una demanda, para “precautelar los derechos del Gobierno”.

Por la compra de los siete aparatos, Defensa desembolsó USD 30 millones por concepto de anticipo. Para la diferencia se establecieron 10 pagarés anuales de 1,5 millones cada uno, que concluían en el 2018.

Actualmente hay una deuda pendiente de USD 6 millones.
Pese a estas situaciones, el titular de Defensa dijo ayer que el país no será perjudicado, pues luego de cada accidente se recuperó el dinero correspondiente por concepto de seguros.

Y dijo que solo por los Dhruv 603 y 605, la aseguradora indemnizó con USD 16 millones por cada nave. “No porque nos hayan regalado dinero, sino porque ese es el costo de reposición. Hoy un Dhruv, con las características de la flota, cuesta eso. Si sumamos esos valores que hemos cobrado, estamos por sobre la cantidad invertida”.

En Defensa se estudia iniciar un proceso de adjudicación de otros helicópteros. Entre los militares se habla, por ejemplo, de naves de origen francés.

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