En el patio de comidas del Paseo San Francisco se utilizan vajilla y cubiertos reusables. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO.
A las tareas de reciclaje -gracias a las cuales se han recuperado 75,06 toneladas de plásticos en lo que va del 2018- se suman nuevos proyectos de ordenanza para evitar el uso de envases desechables en la capital.
Verónica Arias, secretaria del Ambiente del Distrito, cuenta que desde esta dependencia se trabaja en un plan integral para incidir en un consumo cada vez menor de botellas plásticas, fundas y otros artículos relacionados.
“La propuesta será paulatina, porque demanda un cambio en la cultura y en el hábito de la gente, con campañas de concienciación y la industria debe acoplarse a otros requerimientos”, señaló.
Uno de los primeros pasos de este proyecto ya se lleva a cabo -desde hace seis meses- con iniciativas para evitar el uso de sorbetes desechables en restaurantes, hoteles y con los comerciantes de La Floresta. Y aunque todavía la Secretaría no maneja cifras de los resultados, asegura que se está generando conciencia.
De acuerdo con datos proporcionados por la Empresa Metropolitana de Aseo (Emaseo), en la capital se producen a diario 2 227,69 toneladas de desechos sólidos. De esta cantidad, 277,35 toneladas corresponden a fundas y otros tipos de plástico (ver gráfico).
A diario se desechan fundas, recipientes y otros artículos en sitios como los patios de comidas, restaurantes, cafeterías, bares escolares y viviendas.
Con la intención de erradicar por completo la utilización de estos materiales, el concejal Patricio Ubidia impulsa un proyecto de ordenanza bajo la iniciativa Quito Sin Plásticos. Esta idea propone la eliminación total de bolsas, sorbetes y botellas plásticas de bebidas azucaradas en la capital.
“La idea es que se prohíba, por ejemplo, la entrega de fundas tipo camiseta en los supermercados. Cada bolsa se usa por 10 a 15 minutos, a lo mucho, y para que se desgasten debe pasar un mínimo de 100 años, y eso afecta al medioambiente”.
Esta iniciativa ya se trató en una primera sesión de la Comisión de Ambiente del Concejo y está a la espera de incluirse en el orden del día del Cabildo. “La idea es que sea una reducción extensible y que la gente adquiera nuevos hábitos”.
Mientras estos planes se concretan, hay otras ideas que están en marcha y que aportan a la reducción de plásticos desechables. En ese objetivo se concentró Huella Verde, que motiva la utilización de menaje reusable en el patio de comidas del Paseo San Francisco.
Una de las proponentes de este plan, Andrea Garzón, asegura que desde hace ocho meses que ejecutaron su proyecto en ocho restaurantes, han evitado el desecho de 1 600 platos y 2 300 cubiertos al día.
Alexander Naranjo, de Acción Ecológica, cree que las propuestas de reducción de envases plásticos son una buena forma de evitar el consumo de los mismos. “Hay que orientar nuevas formas de consumo en el entorno”. Él opina, además, que hay que repensar nuevas prácticas de usos, y generar espacios de discusión de donde viene esa basura.
Aunque Arias reconoce que estas iniciativas deben estudiarse por las posibles repercusiones en el sector productivo y en quienes se dedican a las tareas de reciclaje en la urbe.
“Hay cierto tipo de cosas que se podrían prohibir, como la espumaflex, pero dando alternativas. La política correcta debería ser la reutilización, la disminución y el consumo responsable de lo que se desecha”.
En Quito operan cerca de 3 000 recicladores que se dedican a la recuperación de cartón, botellas, fundas y envases.
El Municipio tiene un Programa Municipal de Recolección Diferenciada de Residuos Sólidos y cuatro Centros de Educación y Gestión Ambiental (Cegam), donde se trabaja en labores de reciclaje. Con estos programas se recuperaron 203,62 toneladas de plásticos en el 2016 y 227,80 en el 2017.
Paulina Rocano, del Cegam Eloy Alfaro, dice que la cultura de la reutilización y separación de los desechos está tomando forma en la ciudad, principalmente en los estudiantes y empresas. De hecho, a este espacio llegan desechos separados desde 15 empresas.