A un lado del Puente Internacional con Perú hay cruces de madera, por donde se pasan gas y otros productos. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO.
Un estrecho puente de cemento, que no mide más de 2 metros de largo, permite entrar y salir clandestinamente de Perú. Este acceso está montado a 30 minutos de Chacras, una parroquia rural de Arenillas (El Oro), en donde opera una base de Aduanas.
El miércoles (5 de marzo del 2019), este Diario llegó a esta zona fronteriza y observó cómo triciclos y motos cruzan permanentemente entre los dos países.
Entre Huaquillas, Arenillas y Las Lajas, Inteligencia ha detectado 20 pasos ilegales. Por estos senderos pasan incluso grandes camiones, custodiados por autos pequeños.
Ese tipo de logística pertenece a redes delictivas más poderosas, que operan con grupos de colaboradores que alertan hasta de la presencia de agentes aduaneros o policiales.
En el estrecho puente también hay huellas de llantas. Un hombre llega en moto y se detiene al pie de cuatro sacos de limones que están en el piso. Mira a dos militares y no se mueve. Pero ese día, los soldados estaban en el sitio por casualidad, pues desde noviembre del 2018 las FF.AA. dejaron de realizar los controles para evitar el contrabando.
Esto ocurrió luego de que el Ministerio de Defensa finiquitara un acuerdo tripartito firmado el 9 de junio del 2016 entre esa Cartera de Estado, el Servicio Nacional de Aduanas (Senae) y la Unidad de Control Fronterizo de la Policía. Tras esa decisión, actualmente esta tarea es exclusiva de las dos últimas instituciones.
El pasado 27 de febrero, el presidente Lenín Moreno ordenó a las FF.AA. participar de manera más activa en la lucha contra el contrabando y en el control de las armas.
Puentes de madera se usan en el paso legal de Huaquillas a Aguas Verdes. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
El jefe de Brigada de la Infantería Nº 1 de El Oro, Giovanny Ortiz, indica que las tropas solamente realizan controles en busca de armas de fuego y municiones. “Si en estas operaciones detectamos mercadería ilegal llamamos a la Aduana”.
El Senae también tiene limitaciones. En el control de Chacras hay un escáner, aunque es solo para verificar lo que llevan los camiones. Los autos pequeños y los buses son revisados manualmente. Los agentes no tienen espejos para ver la parte inferior de los carros y en la noche utilizan linternas.
Pero las bandas usan los pasos clandestinos desde el canal fronterizo. Así se adentran en la Reserva Ecológica Arenillas o en las propiedades privadas y salen a la vía principal, saltándose el punto de vigilancia.
Los agentes del Senae conocen estos atajos, pero dicen que por la dificultad del terreno arenoso, por la falta de vehículos y de personal no controlan esos pasos ilegales.
Este Diario pidió información al Senae, pero el departamento de prensa indicó que el vocero no estaba disponible.
Para tratar de frenar el contrabando, desde el mes pasado la Aduana empezó a colocar muros de cemento en las salidas de los pasos clandestinos.
La tarde del jueves 7 de marzo, cuatro agentes aduaneros bloqueaban uno de estos corredores de tierra, que están rodeados de maleza y de árboles.
El personal dice que con estos muros obligan a los vehículos a usar la vía principal y pasar por el control. El 3 de marzo, Aduana detectó un cargamento de 550 quintales de arroz valorado aproximadamente en USD 30 000.
El gobernador de El Oro, Danilo Maridueña, dice que las mafias transportan principalmente textiles, medicinas, víveres, licor, combustible y gas.
En diciembre del 2018, el control del Senae detectó ropa, cebollas y licor sin documentos, valorados en USD 25 000.
Entre enero y febrero de este año, el personal realizó 642 decomisos en El Oro. Detuvo a nueve personas y aprehendió 254 vehículos. El monto de lo decomisado ascendió a USD 1,6 millones (ver gráfico).
La Policía también ha tratado de reforzar las tareas. En mayo del 2017 creó la Unidad de Control Fronterizo. Tras finalizar el convenio con el Ministerio de Defensa, 53 policías vigilan la frontera sur de manera independiente.
Ellos dicen conocer los desvíos usados por las bandas, pero aseguran que necesitan personal y equipos para el control. Trabajan con toletes, gas pimienta y el arma de dotación.
Así tratan de frenar a grupos enteros que custodian la
Los policías ya han sido emboscados por la gente que ayuda al traslado de los camiones. Cuando un automotor es aprehendido por los uniformados, la red de colaboradores sale con palos, machetes y piedras y los atacan hasta recuperar la