Familiares se acercan a las lápidas de sus seres queridos en el cementerio de El Batán este viernes 1 de noviembre del 2019. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
Las personas que se quedaron en la capital optaron por ir a visitar a sus seres queridos en los camposantos, la mañana de este viernes 1 de noviembre del 2019.
María Luisa Sangula fue una de las personas que acudió al cementerio de El Batán, muy temprano. Hubo poca concurrencia. Allí visitó la tumba de su padre y decidió colocarle nuevas rosas. Toda su familia también llegó al lugar, porque según dicen, los siguientes días habrá demasiadas personas y movilizarse les resultará complicado.
En el cementerio de El Tejar, en el centro de la capital, el movimiento fue mayor. La gente comenzó a llegar desde muy temprano. Algunas personas lo hicieron con agua y trapos, y se dedicaron a embellecer los nichos y los alrededores de las tumbas.
Esta fecha también es aprovechada por aquellas personas que necesitan un ingreso extra. A lo largo del camposanto hay quienes ofrecen sus servicios para arreglar las lápidas. Cobran USD 0,50 por recortar las hierbas que están demás y quitar el polvo.
Personas trabajan en el arreglo de lápidas y nichos en el cementerio de El Tejar. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
También hay quienes se ofrecen a pintar los nichos y abrillantar el mármol, y cobran dependiendo del tamaño, entre USD 0,50 y USD 1.
El costo no ha subido desde el año pasado, dice Jorge Benítez. Este joven acude todos los años en esta misma fecha a visitar a su padre.
Para Benítez, es preferible acudir el 1 de noviembre, por que el 2 hay demasiada gente y en el cementerio no hay espacio para poder caminar con tranquilidad.
Las calles cercanas a los camposantos se congestionaron. Hubo ventas ambulantes de flores y alimentos.