China espera que el año del 'mono de fuego' traiga más nacimientos al país

En China, las personas esperan una mejor suerte desde el lunes 8 de febrero. Ese día inicia el año del 'mono', el signo zodiacal del calendario chino. Foto: AFP

En China, las personas esperan una mejor suerte desde el lunes 8 de febrero. Ese día inicia el año del 'mono', el signo zodiacal del calendario chino. Foto: AFP

En China, las personas esperan una mejor suerte desde el lunes 8 de febrero. Ese día inicia el año del 'mono', el signo zodiacal del calendario chino. Foto: AFP

China espera que el año del 'mono de fuego' que comienza el lunes 8 de febrero del 2016  en el país, mejor visto en el zodíaco chino que el de la "cabra" saliente, y la posibilidad desde enero de que todas las parejas tengan dos hijos contribuyan a repuntar el número de nacimientos.

La potencia asiática dará en la medianoche del domingo la bienvenida al "mono de fuego", una derivada del signo del 'mono' que solo ocurre cada 60 años y que para los chinos es señal de buena suerte, además de que los nacidos bajo su influjo se presuponen listos y triunfadores en la vida.

Un brillante pronóstico en las antípodas del de la 'cabra', uno de los signos con peor reputación en la civilización oriental, y al que algunos expertos atribuyeron la bajada de nacimientos en China en 2015, hasta un 1,89% interanual, la primera en cinco años.

El Gobierno chino lleva ya unos años eliminando gradualmente la draconiana política del hijo único, que desde la década de 1980 prohibió a las familias tener dos vástagos y que ha dejado como legado un agudo problema de envejecimiento de la población y una peligrosa desproporción entre hombres y mujeres.

Pero aunque desde 2013 cualquier matrimonio donde uno de los cónyuges no tuviera hermanos puede ir "por la parejita", las solicitudes han sido mucho más bajas de lo esperado, y en 2014, por ejemplo, solo un millón de parejas solicitaron tener un segundo hijo, la mitad de lo que habían pronosticado las autoridades.

Al margen de supersticiones, las razones que exponen los padres potenciales para frenar la progenie son más bien prácticas, como la presión laboral, la incertidumbre sobre el futuro, el mayor confort tras décadas de escasez o, simplemente, la costumbre de haberse criado en soledad.

Por eso la nación más poblada del mundo intenta persuadir a esa generación nacida bajo restricciones demográficas de los beneficios de aumentar la descendencia, y, si el año pasado la prensa oficial china le hizo propaganda a la 'cabra', éste ensalza las virtudes del 'mono'.

La agencia oficial Xinhua se suma hoy a otros medios oficiales que han destacado en los últimos días las ventajas del 'mono' sobre la 'cabra'.

"El mono es favorecido por muchos padres, porque creen que los bebés nacidos este año serán enérgicos, sociales, seguros en sí mismos, listos e innovadores", reza el artículo de Xinhua.

Una plétora de cualidades que muchas mujeres en edad de engendrar no parecen tener ya muy en cuenta, como Lin Ran, de 26 años, recién casada y quien dice a Efe que "le da igual cuándo" tener hijos, o Violeta, un año mayor, quien confiesa que ni siquiera "sabía que el mono era tan popular".

La farmacéutica Fang Fang, de la misma edad, indica en cambio a Efe que sí planea tener un bebé este año, "pero no por el mono, sino porque mis familiares me están metiendo prisa", mientras Wang Sikun admite, a sus 29, que aunque "no me importa cuándo nazca, lo intentaremos por mi abuela, que es mono y quiere que haya otro".

Sea o no por el influjo del 'mono', el Gobierno chino espera que con la entrada en vigor de la "política de los dos hijos" nazcan este año alrededor de un millón de niños más, y con ello se llegue a los 17 millones de bebés anuales, una cifra que el país aún no ha conseguido alcanzar en lo que va de siglo.

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