50 centros de tolerancia cerrados en el Distrito durante siete meses

Uno de los centros de tolerancia vip que fue clausurado definitivamente se encuentra en el sector del antiguo aeropuerto. El cierre se dio en febrero. Fotos: Vicente Costales/EL COMERCIO

Uno de los centros de tolerancia vip que fue clausurado definitivamente se encuentra en el sector del antiguo aeropuerto. El cierre se dio en febrero. Fotos: Vicente Costales/EL COMERCIO

Uno de los centros de tolerancia vip que fue clausurado definitivamente se encuentra en el sector del antiguo aeropuerto. El cierre se dio en febrero. Fotos: Vicente Costales/EL COMERCIO

Conocidos centros de tolerancia de Quito fueron clausurados en las últimas semanas. Locales ubicados en Iñaquito, Carcelén, Quito Norte, El Inca, Quitumbe, Chillogallo se sumaron a una lista de negocios que cerraron sus puertas.

Según datos del Ministerio del Interior, desde el 1 de agosto del año pasado hasta el viernes se efectuaron 50 clausuras, en 92 locales intervenidos. Pero la Asociación de estos centros asegura que entre el 2014 y lo que va del 2015 se han cerrado 132 sitios del Distrito.

Para los dueños, los locales de tolerancia son sujetos a un “barrido”, con una realidad legal poco clara. Por un lado, está el control del Municipio y, por el otro, el de la Intendencia de Policía (y las comisarías).

Cada instancia tiene sus propias normas para regular esta actividad. En diciembre del 2014, el Cabildo emitió la Resolución A016, en la que se autoriza la entrega de una Licencia Provisional de Funcionamiento. Se especifica que los locales podrán atender en el sitio donde funcionan, mientras duren los estudios para definir su reubicación definitiva, hasta un plazo de tres años.

La principal condición: que funcionen antes del 2010 y que no dispongan de la licencia única de funcionamiento.

Por otro lado, el 30 de enero, el Ministerio del Interior expidió el Acuerdo 5318ª. Este incluye que, si en los operativos se encuentran armas de fuego, sustancias sujetas a fiscalización, menores y/o personas indocumentadas se realizará la clausura definitiva. Esas son algunas de las razones de los cierres que se han dado en la urbe, indicaron funcionarios que pidieron la reserva.

Detrás de los operativos, hay secuelas, sostiene Gonzalo Lara, dirigente de los locales clausurados: mujeres que se quedan sin sitio para laborar y familias que dependen de esos ingresos. Las trabajadoras sexuales se ven obligadas a peregrinar buscando un sitio y otras optan por salir a las calles.

Lara sostiene que hay locales que han sido clausurados por la Intendencia sin cumplir con los procedimientos. El local del dirigente (en el sur) lleva casi ocho meses inactivo. Este tiene 22 años y por antigüedad, según la Resolución A016, debería poder funcionar, dice. Con él trabajaban 45 mujeres, de lunes a sábado. La ficha costaba USD 12 (10 para la chica). Unos USD 60 la noche.

Lourdes Torres, dirigente de las trabajadoras sexuales que laboran en centros de tolerancia y parte de la Asociación Prodefensa de la Mujer, sostiene que debe haber control, pero unido a los diálogos. Se pregunta: si se cierra un local, ¿qué opción se da a las mujeres? La organización agrupa a 3 000.

En la urbe, se pueden observar centros de tolerancia clausurados, como el VIP ubicado en el sector de Iñaquito, uno de los casos más conocidos en el Distrito. Mientras, en El Labrador, otro funciona junto a un centro de servicio automotriz.

Desde el Municipio, se apunta a la creación de un bulevar. Juan Zapata, secretario de Seguridad, afirma que la resolución está enfocada a regular los establecimientos mientras duren las mesas de trabajo con los sectores y se defina el nuevo espacio para la actividad. No obstante, para él es necesario que, cada vez más, las acciones de control se realicen de forma conjunta con la Intendencia.

En los operativos, el Cabildo puede clausurar un local por falta de licencia, uso de suelo e incumplimiento de normas de seguridad contra incendios.

Sin embargo, dice Lara, ellos no pueden seguir con los locales cerrados y pregunta: ¿por qué lugares en malas condiciones funcionan y otros son cerrados? Para él, están en medio de dos corrientes: la municipal y la del Estado.

La comisaria cuarta del cantón Quito, Rocío Martínez, apunta que solo en el área de su competencia (avs. Rodrigo de Chávez y Naciones Unidas), entre el 2014 y el 2015, se han clausurado 21 centros.

Los locales vip no se han librado. El Café Rojo es uno de ellos. Allí, tres sellos verdes impiden el ingreso. La clausura definitiva se dio el 6 de febrero. A unos metros, María Pilatuña lleva 20 años vendiendo comida típica. Desde la clausura, la venta diaria bajó de USD 250 a unos USD 60. El movimiento empezaba a las 13:00 y ahora solo hay silencio. Hay otros negocios cerrados que están en el centro norte quiteño.

Los operativos también se realizan a escala nacional. En el 2014, 195 intendencias y comisarías clausuraron 50 ‘night clubs’. En los controles se detuvo a 14 personas.

Este Diario conoció que los controles seguirán en el Distrito Metropolitano de Quito.

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