Las calles céntricas de Santo Domingo lucieron congestionadas de compradores en las primeras horas de los días a la víspera de la Navidad. Foto: EL COMERCIO
Los operativos para controlar el toque de queda, el aforo en establecimientos y normas de bioseguridad continúan en Santo Domingo, en el occidente del Ecuador.
Este miércoles 23 de diciembre del 2020, la comisión de operativos liderada por la Intendencia, Cuerpo de Bomberos y agentes de control ciudadano del Municipio realizaron inspecciones en centros de comercio, el paseo shopping y principales locales de todo tipo de ventas en el centro de esta urbe.
Durante el recorrido se constató que las pequeñas empresas aplican los protocolos con sus clientes, pero en los puestos de venta al aire libre hay pocas seguridades, sobre todo, por la falta de espacios para el distanciamiento.
Esto se evidenció en las avenidas 29 de Mayo, Tsáchilas, Quito y 3 de Julio.
Por los corredores de estas zonas las aglomeraciones estaban fuera de control. Los comerciantes dicen que esto se debe a los ajustes en los horarios sobre el toque de queda que empieza a las 22:00. “Muchas personas aprovechan la jornada de la mañana y parte de la tarde para venir en grandes grupos y eso causa congestión”, aseguró el director de la Cámara de Turismo, Ángel Montero.
Esto lo dijo a propósito de que su gremio ha emitido críticas contra las medidas de restricción impuestas por el Gobierno porque afectan la economía del comercio.
Y agregó que una de las consecuencias de esas disposiciones ya se evidencia en las calles porque las personas salen desesperadas a comprar.
La noche del martes 22 de diciembre de 2020 el retorno a casa fue tardío para muchos. Conductores, motorizados y transeúntes fueron sorprendidos por los controles en la capital de la provincia. Como resultado de esos operativos también fueron clausurados dos locales por expender bebidas alcohólicas.
Un carro fue aprehendido por circular en el día que no le corresponde y fuera del horario permitido. Otro ciudadano fue sancionado por caminar en estado etílico en la vía.
El intendente, Wilson Rumiguano, dijo que los operativos se duplicarán a partir de la noche de este 23 de diciembre.
Ya no solo se centrarán en la parte central de la urbe sino también en los barrios desde donde se han tenido reportes de concentraciones deportivas, reuniones sociales en las esquinas y fiestas clandestinas.
Rumiguano viene insistiendo al Municipio que analice un proyecto de ordenanza para sancionar directamente a los propietarios de viviendas y sitios donde se hacen esas denominadas caídas.