Para que los conductores aprovechen el tiempo que pasan en el vehículo, el objetivo es que circulen en el futuro con un piloto automático. Foto: Archivo
“Hola Jane”, se lee en la pantalla. El auto adapta el asiento para quien va a conducir, selecciona la radio favorita, dice cuál es el pronóstico meteorológico en el lugar de destino y lee novedades de las redes sociales para Jane.
En el camino, además se da cuenta de que el tanque está por vaciarse y propone una estación de servicio que no solo está en las inmediaciones sino que además ofrece un buen precio.
Lo único que debe hacer Jane es navegar por el mapa que se ve en la pantalla. Jane es una conductora ficticia que está al volante en un video promocional de la empresa alemana Bosch, que muestra hacia dónde se encamina la innovación en el mundo automotor.
“Desde nuestra perspectiva, ese es el futuro que está por venir”, asegura Jiri Marek, a cargo de la sección de Investigación y Tecnología de Bosch en Palo Alto, California.
Axel Gern, director de Conducción Autónoma del Departamento de Investigación y Desarrollo para América del Norte de Mercedes Benz, en Sunnyvale, explica por qué los fabricantes de autos creen que es necesario este tipo de tecnología: las ciudades más grandes del mundo continúan creciendo, y con ellas el número de vehículos y los embotellamientos.
“La gente pasa tiempo de su vida en el carro. Por eso la idea es crear un tercer espacio vital además de la vivienda y la oficina”, explica.
Para que los conductores puedan aprovechar ese tiempo que pasan en el vehículo, el objetivo es que circulen en el futuro con un piloto automático por las calles.
Todos los fabricantes trabajan en proyectos para hacer los autos más inteligentes con ayuda de chips de telefonía móvil y asistentes digitales.
Tanto Audi como BMW estudian por ejemplo formas para que el automóvil busque sitio en un estacionamiento. Y BMW y Volkswagen experimentan con el control por gestos, para que no haga falta ya tocar la pantalla.
Daimler presentó en enero en la feria tecnológica CES de Las Vegas un prototipo que circula de forma autónoma y que puede ser llamado a través de una aplicación del smartphone.
El F015 es un modelo de diseño alargado, futurista, y cuenta en el interior con asientos delanteros girables. El objetivo es tener en circulación estos vehículos para 2030.
Los primeros pasos hacia el carro inteligente ya existen, sea en forma de asistentes electrónicos para estacionar o asistentes en caso de embotellamientos, que hacen que el coche siga automáticamente al que va adelante guardando la distancia de seguridad y evitando despistes que provoquen choques.
Internet también está cada vez más presente en el auto. Hoy ya es posible integrar el celular y utilizarlo con total seguridad por ejemplo mediante comandos de voz.
En el futuro, los autos estarán intercomunicados y podrán intercambiar informaciones, como sobre posibles riesgos en la ruta. “Queremos que el carro sea capaz de prever lo que quiera el cliente”, asegura el CEO de Investigación y Desarrollo de Mercedes Benz en Estados Unidos, Arwed Niestroj.
Por ejemplo, si el conductor se sube al vehículo por la mañana con el celular y el portafolio, el auto debería reconocer que desea ir a la oficina. Además, gracias a la integración en red el conductor debería poder ver en casa cuántos kilómetros ha recorrido, si es necesario hacer una revisión en el taller o cuándo hay que volver a cargar combustible.
El desarrollo de este tipo de inteligencia artificial lleva tiempo, y por buenas razones, destaca el especialista de Bosch Marek: las exigencias de calidad en el sector automotor son muy altas porque cualquier error puede tener graves consecuencias.
Además, asegura que uno de los grandes desafíos es que el software que se instala en los carros se mantenga vigente muchos años, tantos como el vehículo siga en circulación.
Otro punto importante es la protección de datos, ya que los primeros ciberataques a los sistemas inteligentes en el sector ya se han registrado.
En Silicon Valley, también Google y Apple investigan en torno a la digitalización de los autos del futuro, lo que ha hecho surgir la pregunta de quién debe tener acceso a los datos en los vehículos.
El presidente de Volkswagen, Martin Winterkorn, opinó hace poco que la información debe ser administrada por las automotrices, ya que es el único modo de garantizar la seguridad.