Azoulay, que reemplazará a la búlgara Irina Bokowa, consiguió la mayoría absoluta al llegar a 30 votos, dos más que los obtenidos por el exministro de Cultura qatarí Hamad Bin Abdulaziz Al Kawari. Foto: Agencia EFE
La exministra de Cultura y Comunicación francesa Audrey Azoulay, de 45 años, fue elegida este viernes 13 de octubre de 2017 en París como directora de la Unesco, anunció el presidente del Consejo Ejecutivo del organismo, Michael Worbs.
Azoulay, que reemplazará a la búlgara Irina Bokowa, consiguió la mayoría absoluta al llegar a 30 votos, dos más que los obtenidos por el exministro de Cultura qatarí Hamad Bin Abdulaziz Al Kawari.
En total, son 58 los votos que se reparten en el Consejo Ejecutivo que elige al director del organismo y que tuvo que seleccionar entre 7 candidatos. De todas formas, la elección debe ser aprobada por la asamblea general de los 195 miembros de la Unesco el mes que viene.
La nominación de la directora de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) se da un día después de que Estados Unidos e Israel se retiraran tras denunciar que el organismo tiene “un sesgo anti-israelí”.
Al respecto, Francia respondió que Azoulay era una candidata que pudo “superar las bpolíticas en beneficio de las misiones esenciales de la Unesco”. El Gobierno alemán, en tanto, calificó ayer la decisión de Washington y Tel Aviv como “una señal errónea”.
El organismo está a favor de la paz y la comunicación, especialmente en tiempos de crisis, destacó el portavoz de la canciller Angela Merkel, Steffen Seibert. Por ello, tiene una gran importancia contar con una Unesco fuerte y fiable, agregó.
París aboga por un nuevo concepto que rija a la Unesco, con el objetivo de superar las profundas grietas políticas y generar confianza. Para Francia, en tanto miembro del organismo, el futuro de la Unesco tiene un significado especial.
En los últimos años su actividad estuvo empañada por disputas políticas con respecto al conflicto en Oriente Medio, sobre todo después de que en 2011 decidiera incorporar a los palestinos como Estado miembro.
Además, ha intercedido en la preservación de la biósfera o cuestiones de educación, entre otros temas. La elección de Azoulay puede ser tomada como un éxito de la gestión del presidente francés, Emmanuel Macron, en el cargo desde mayo.
La directora electa se desempeñó desde 2014 como asesora cultural del antecesor de Macron, François Hollande, y en 2016 asumió en la cartera de Cultura, cargó que dejó cuando asumió el actual jefe de Estado para aspirar a la dirección del órgano de la ONU encargado del patrimonio cultural del mundo.