Tess Muster firmó con Milk Managment, una de las más importantes de la industria. Foto: Instagram/ tessholliday.
Tess Munster, de 1,65 metros de estatura, se convirtió en la primera supermodelo de 120 kilos en ser fichada por una de las más prestigiosas agencias del mundo, Milk Management.
En la página oficial de la agencia, los perfiles de las modelos de la sección ‘curve’ (curvas) escapan de los patrones tradicionales de alta costura, que le rinden culto a la extrema delgadez. A estos se sumará pronto el rostro de la modelo de talla 54.
Anna Shillinglaw, representante de Milk, explica que contrató a la joven “tras ver el seguimiento que tenía en Internet y cómo transmite desde allí mensajes positivos a mucha gente. Es la voz de muchas personas que permanecen en silencio”, según recoge el portal ABC.
La supermodelo es un ícono para muchos de sus seguidores en la web, sobre todo para las mujeres de talla grande, pues Munster ha reivindicado la sensualidad de la gordura. La activista ha liderado una campaña en las redes bajo el hashtag #effyourbeautystandards (fuera de los cánones de belleza).
Su influencia en las redes se revela en números: en su cuenta de Twitter, tiene más de 22 000 seguidores, mientras que su fanpage en Facebook supera los 650 000 ‘me gusta’, y en Instagram más de 385 000 usuarios la siguen.
Munster no es la única modelo que ha roto con cánones tradicionales de la industria; Winnie Harlow sorprendió al mundo al convertirse en la primera con vitiligo. También Jilian Mercado recientemente protagonizó una campaña de Diesel sentada en su silla de ruedas y Shaun Ross es el primer modelo albino masculino.