El tunán (tela para faldas)es multicolor y se utiliza para dar identidad tsáchila en los negocios y oficinas. Fotos: Juan Carlos Pérez/El Comercio
La nueva tendencia en las oficinas públicas y privadas de Santo Domingo es utilizar adornos tsáchilas en los escritorios, recepciones y salas de espera.
Las tunán y manpe tsanpa -faldas de hombres y mujeres tsáchilas- son las más utilizadas en los escritorios.
Se colocan en forma de tapetes o en el espaldar de las sillas. Los telares pueden ser de varios colores como rosado, amarillo, azul, verde y rojo, y son utilizados en las mujeres tsáchilas como una falda. La tunán blanca y negra es la que se colocan los hombres.
Antiguamente, las mujeres tsáchilas las confeccionaban. Pero el oficio ya no se practica porque elaborar un metro tarda hasta dos meses, debido a que se teje manualmente.
En los lugares donde se realizan artesanías para decoración rústica o nativa, el telar se adquiere en Otavalo (Imbabura). “Tienen un costo más bajo y por eso se pueden utilizar como arreglos artesanales”, aseguró la diseñadora Cristina Dueñas. Un metro de un telar tsáchila cuesta entre USD 50 y USD 80. Mientras en Otavalo se encuentran en USD 20.
Dueñas decora interiores desde hace cinco años. Ella asegura que es la primera vez que se le da importancia a los tsáchilas en la decoración de interiores. “Las campañas promocionales en los medios y redes han hecho que se muestren las costumbres tsáchilas”.
Ella asegura que la idea de decoración tsáchila nació porque en el 2010 se entregaron invitaciones en forma de tsáchilas para un evento público. “Estas se colocaron en las oficinas, pero con el tiempo buscaron nuevos elementos para darle identidad santodomingueña a la empresa”.
Una de las ventajas de utilizar la tunán es la versatilidad de la prenda. Se puede colocar en las mesas o, también, darle usos más prácticos. En el local de turismo Tierra Tsáchila se colgó una chumbillina en la pared. A esta se le cosieron bolsillos donde se archivan guías turísticas e información, que los viajeros pueden tomar de forma gratuita. Este tarjetero tiene un costo de USD 40.
Otrouso es forrar la base de las lámparas con el telar. “Le dará un toque de identidad tsáchila y única al espacio, pero no se sobrecargará de colores el lugar”.
La tunán se complementa con imágenes típicas de tsáchilas entonando la marimba o de fotografías de festivales.