Un sistema facilita la conducción a personas con discapacidad

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No hace falta aplastar el acelerador, el freno ni el embrague para conducir. Los botones, situados en la palanca de cambios, cumplen estas funciones. El sistema fue creado para las personas que, por alguna circunstancia, no pueden usar sus piernas y que por lo tanto se ven impedidos de conducir. Lo crearon dos jóvenes ecuatorianos, Luis Eduardo Chinchín y Santiago Cueva, ambos estudiantes de la Universidad Politécnica Javeriana, en Quito. Por el momento, este sistema está en la fase de prototipo, pero sus creadores tienen la intención de comercializarlo si encuentran apoyo económico.Diseñaron este mecanismo de conducción para graduarse de ingenieros. Tardaron dos años en el desarrollo y fabricación.Armando Romero, asesor de la tesis, dice que la mayoría de personas con discapacidad, entrevistadas por los dos estudiantes, escogieron la palanca de cambios como el sitio idóneo para activar los botones de freno, acelerador y embrague. “El sistema no requiere el movimiento de los pies. Todo está en la palanca. El conductor solo utiliza sus dedos”. Romero, ingeniero mecánico, precisa que aunque esta plataforma de conducción funciona sin inconvenientes, es necesario mejorar la parte estética. Esta tecnología está compuesta por motores eléctricos que están localizados en el pedal del embrague y el freno y un servomotor, ubicado en el acelerador. Un servomotor es un dispositivo compuesto por un motor y un sistema de control de posición. Los motores simulan el movimiento de las piernas de un conductor sobre los pedales y se mueven de forma secuencial. Si el conductor pulsa lentamente el botón que corresponde a la acción de acelerar en la palanca de cambios, el motor ubicado en el pedal del acelerador registrará esta acción y se desplazará despacio.Si, por el contrario, el usuario pulsa rápido el botón, el auto alcanzará mayor velocidad. Chinchín precisa que los botones tienen movimientos lineales. “Las acciones rápidas o lentas se traducen al motor y este solo los ejecuta”. Para que haya un enlace entre los botones de la palanca de cambios y el motor, sus creadores utilizaron una tarjeta electrónica que es el cerebro del sistema. Patricio Cabezas fue el primero en probar este desarrollo. Este ecuatoriano con problemas de motricidad en sus piernas considera que el sistema está bien diseñado. Sugiere que debería comercializarse en el país para que las personas con discapacidad se beneficien de esta innovación. Según Romero, este mecanismo que facilita la conducción es el primero que se desarrolla en el país. Cueva, codiseñador del sistema, dice que dedicaron fines de semana y feriados en crear el dispositivo con el que esperan graduarse pronto. “Fueron muchas malas noches. Invertimos cerca de USD 2 000”.

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